Ecuador: Registran alta actividad del volcán Reventador

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Quito, 13 jul (EFE).- La actividad del volcán ecuatoriano Reventador, situado a unos 90 kilómetros de Quito, se mantuvo alta en las últimas horas con incandescencia en su cráter y rodamiento de bloques bajo la cumbre, informó el Instituto Geofísico Nacional.

El volcán registra desde el pasado mes de mayo una intensa actividad caracterizada por ocasionales erupciones y emisiones de gases y ceniza, que hasta el momento no han causado mayores daños.

"Se mantiene una actividad eruptiva alta. Durante la noche se pudo observar incandescencia en el cráter y rodamiento de bloques hasta 1.000 metros bajo la cumbre", reza un boletín del mencionado Instituto difundido en las últimas horas.

El Reventador es un "estrato volcán compuesto", situado en una estribación del ramal oriental de la cordillera andina que se pierde con el inicio de la cuenca amazónica.

De 3.560 metros de altura, comenzó su actual proceso eruptivo en 2002 consistente en la generación de explosiones, emisiones de gases y ceniza, flujos de lava y lahares. 

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El Reventador es un volcán de Ecuador, ubicado aproximadamente a 90 km de Quito, entre las provincias de Napo y Sucumbíos. Es uno de los volcanes más activos del arco volcánico ecuatoriano, habiendo tenido al menos 16 erupciones desde 1541.

La existencia del volcán Reventador se reconoció oficialmente después de la exploración de J. H. Sinclair (1929), gracias a la cual se obtuvieron descripciones confiables del volcán y de su ubicación en la región comprendida entre los ríos Coca, Salado y Dué.

Las primeras descripciones cualitativas de las erupciones más recientes fueron proporcionadas por Hantke y Parodi (1966) y Hall (1977). Únicamente sus dos últimas erupciones (la de abril de 1976 y la de noviembre del 2002) son descritas con algún grado de detalle.

La última gran erupción del Reventador, ocurrida el 3 de noviembre de 2002, alcanzó un índice de explosividad volcánica de 4. A partir de ese año continúa en actividad eruptiva, generando una gran cantidad de señales sísmicas y de infrasonido.