Una señora peruana asesinó a martillazos a su marido tras sostener una acalorada discusión luego de compartir bebidas alcohólicas y el ahora fallecido obligara a la mujer a sostener relaciones sexuales a la fuerza.
Tras la fuerte discusión, una mujer asesinó de varios martillazos a su pareja, de oficio zapatero, dentro de su vivienda ubicada en el asentamiento humano 8 de marzo, en Ventanilla, Callao, zona centro-oeste del Perú.
Estela Reátegui Paima, de 50 años, se entregó a la Policía y dijo que la noche del domingo estaba tomando licor con su conviviente Juan Palomino Carrasco, de 50 años, en la casa que compartían, pero luego discutieron.
“Él quería obligarme a tener relaciones sexuales, yo me molesté y por eso discutimos. Luego me agarró de las manos y yo en un descuido agarré un martillo que estaba en el piso y le tiré en la cabeza varias veces”, dijo con frialdad a Ojo.
Añadió que luego arrastró el cuerpo hasta la sala y fugó. “Me nublé, no quería matarlo, fue en un momento de cólera”, añadió la mujer, quien luego de unas horas de estar prófuga acudió al Depincri del sector y se entregó a las autoridades.
Los familiares informaron que Juan Palomino era dopado constantemente por su pareja y por eso presumen que el día del crimen él haya estado bajo los efectos de alguna pastilla.
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“Una vez le dio de tomar tres pastillas para dormir. Cuando le reclamé, ella aceptó que siempre le daba esas pastillas”, informaron los familiares.
Ellos añadieron que hace un mes, cuando viajaron a Cusco debido a que la víctima fue mayordomo en honor a la Santísima Cruz de Santa Teresa, la mujer había matado a los dos perros de Juan Palomino.
“Incluso, hace una semana ella le robó dinero. Desapareció dos días y luego regresó. Mi hermano la perdonó”, informó la hermana de la víctima.
