Capturan a presunto responsable de la muerte de adolescente al que le hicieron «la malteada»

Agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) capturaron este jueves a Carlos Alberto Mazariego Moz, presunto responsable de la muerte de Mario Ernesto Rivera González, de 15 años, quien perdió la vida tras ser víctima de acoso por parte de vecinos, que le hicieron “la malteada”(lanzarlo al aire), en San José Guayabal, municipio de El Salvador. 

De acuerdo a la Fiscalía General de República (FGR), Mazariego Moz fue capturado en Cojutepeque, El Salvador, por el delito de homicidio culposo del menor.

Rivera murió el pasado lunes 26 de febrero, cuando los médicos del Hospital Rosales le diagnosticaron trauma craneal severo (golpe en la cabeza).

Según los familiares, el miércoles 21 de ese mismo mes, a las 6:00 de la tarde, Mario salió de su casa hacia la tienda; su tío Víctor Rivera lo había enviado a comprar el pan. A su regreso, a unos cinco metros de su casa en el barrio El Niño, caserío El Perical, el joven fue abordado por tres vecinos, que sin mediar palabra lo tomaron de pies y manos para lanzarlo al aire, sin razón alguna.

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Mario se resistió y entre el forcejeo recibió algunos golpes. Como consecuencia del acto, cayó al suelo y aterrizó con la cabeza. “Eso terminó con su vida, ha sido fatal”, comentó el tío.

Aún así, el joven, entre, mareado y con poca visión pudo levantarse y llegar hasta su casa. Al observar la reacción de Mario, los vecinos, dos mayores de edad y un menor, que no pertenecen a ninguna pandilla, lo auxiliaron llevándolo hacia una clínica cercana, donde no recibió ninguna atención, no encontraron al médico.

Mario siguió con los síntomas. Su madre, María, llegó de trabajar hasta las 9:00 de la noche y encontró al muchacho tirado en una hamaca.

Durante toda la noche, el joven no paró de vomitar y sentir mareos, cada vez iba perdiendo más la visión.

Así continuó hasta la mañana del jueves, cuando la madre del menor lo trasladó a la clínica. En ese momento Mario ya había perdido el conocimiento.

En el lugar, la doctora le dijo que su hijo ya no tenía esperanza, que iba a morir por parálisis cerebral.

Aún con la fe puesta en Dios, la madre transportó a su hijo al hospital Rosales, donde le dieron la respuesta definitiva, “tenía que prepararse para su muerte”.

Cinco días después, Mario falleció.

Después del accidente, vecinos y compañeros comentaron que sufría de bullying desde hace tiempo atrás, sin embargo el muchacho nunca comentó nada.