CIUDAD DE MÉXICO (AP) — La candidata presidencial independiente mexicana Margarita Zavala pidió el jueves un momento de silencio por el asesinato de tres mujeres embarazadas en la última semana.
México quedó impactado por los asesinatos, en los cuales los bebés aparentemente fueron extraídos del vientre de las madres. Al menos uno de los pequeños murió, uno sobrevivió y el destino del tercero se desconoce.
Durante un mitin de campaña, Zavala dijo que "en la última semana se han escuchado historias desgarradoras de tres mujeres embarazadas que fueron asesinadas por robarles su bebé… No podemos acostumbrarnos a aceptar tanta violencia".
Dos personas ya fueron arrestadas por el primero de los homicidios, el de una mujer reportada como desaparecida el 27 de marzo en el estado fronterizo de Tamaulipas.
El cadáver de la joven de 20 años, identificada por la fiscalía estatal sólo por su nombre, Jessica Gabriela, fue encontrado el 31 de marzo después de que una mujer llegara al hospital con un bebé muerto con la esperanza de que los doctores pudieran revivirlo.
La fiscalía dijo que los médicos pronto descubrieron que esa mujer no era la madre y cuando la policía fue a buscarla a su casa encontraron el cuerpo de la víctima y arrestaron a la suplantadora y a su marido. Ambos están acusados de homicidio.
Jessica Gabriela estaba embarazada de ocho meses y, según medios locales, la presunta asesina la había contactado a través de las redes sociales para regalarle ropa de bebé.
Otro caso ocurrió en el estado vecino de Veracruz, donde las autoridades ofrecieron una recompensa de 55.000 dólares por información que condujera al arresto de Brianda Padrón Cano, presunta responsable de matar a una mujer para extraerle el niño que llevaba en su vientre.
El bebé logró sobrevivir y según la prensa local, que citó a familiares de la víctima, la sospechosa también le había ofrecido ropa a su víctima.
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El tercer caso ocurrió en Tabasco, en el sureste pero también en el golfo de México, como Veracruz y Tamaulipas.
La fiscalía tabasqueña no confirmó de forma inmediata el asesinato pero los medios locales informaron el hallazgo de una mujer embarazada acuchillada el 1 de abril. Su hijo de cuatro años fue localizado en las inmediaciones del lugar con la ropa manchada de sangre.