LIMA (AP) — El Congreso peruano aceptó el viernes la renuncia a la presidencia de Pedro Pablo Kuczynski, quien dimitió el miércoles tras 20 meses de gobierno acosado por sus nexos con Odebrecht.
Por 105 votos a favor, 12 en contra y cuatro abstenciones el pleno del Parlamento aceptó la renuncia del exbanquero de Wall Street y dejó el camino libre para que lo reemplace en el cargo Martín Vizcarra, el primer vicepresidente y embajador en Canadá.
Vizcarra, sucesor de acuerdo con la ley, llegó a Lima durante la madrugada. Sus simpatizantes le dieron la bienvenida en el aeropuerto internacional con un gran pastel decorado con los colores rojo y blanco de la bandera peruana porque el jueves cumplió 55 años. Una banda musical acompañaba a cientos de personas cargando carteles que decían "El pueblo con Vizcarra".
"Fe y optimismo, el Perú siempre puede salir adelante", dijo mientras sostenía una camiseta de la selección peruana de fútbol que le regalaron.
Vizcarra salió de su departamento ubicado en un edificio de un barrio residencial de Lima junto a su esposa, una profesora de educación inicial. Saludó a la prensa apostada frente a su casa y subió a un auto negro que lo llevó rumbo a la cancillería, donde esperará a un grupo de parlamentarios que lo invitará a ir al Congreso para tomarle juramento, según la costumbre peruana.
Los esfuerzos para sacar del poder al impopular Kuczynski liderados por Keiko Fujimori -quien perdió las elecciones presidenciales y dirige al mayor partido opositor en el Parlamento- fueron constantes y también estuvieron alimentados por los sucesivos errores políticos del mandatario.
Pero la campaña se disparó esta semana tras la aparición de videos grabados en secreto que mostraban a aliados de Kuczynski, incluido Kenji Fujimori -el hermano menor de Keiko-, supuestamente intentando comprar el apoyo de un legislador opositor para bloquear el juicio político en su contra.
Las turbias relaciones entre Keiko Fujimori y Kuczynski, que caracterizaron los 20 meses de gobierno del exbanquero, se mantuvieron incluso el viernes cuando Kuczynski amenazó con retirar su carta de renuncia a la presidencia y someterse a un extenso proceso de vacancia si el Parlamento dominado por el partido de Keiko aprobaba un borrador que se filtró a la prensa donde se buscaba declararlo traidor a la patria.
"Inaceptable propuesta de resolución legislativa del Congreso que intenta presentar como vacancia una renuncia", dijo Kuczynski en su cuenta oficial de Twitter. "De ser así, retiro mi carta y me someto al procedimiento regular de vacancia donde ejerceré mi derecho de defensa", añadió.
El borrador de la resolución mostrado por la prensa local y cuya existencia fue confirmada por el presidente del Parlamento, Luis Galarreta, indicaba que Kuczynski "ha traicionado a la patria en el desempeño de los cargos públicos que ha ejercido a lo largo de su vida".
Las grabaciones ocultas que derrumbaron la credibilidad de Kuczynski son el último capítulo de un drama que empezó hace meses con revelaciones de que el mandatario recibió dinero de la constructora brasileña Odebrecht, lo cual desató pedidos para que fuera destituido.
El caso Odebrecht ha provocado una profunda crisis en Perú que ha salpicado a todos los presidentes desde 2001 y que también incluye a Keiko Fujimori.