Sao Paulo, 11 mar (EFE).- Las autoridades brasileñas detuvieron hoy a un hombre sospechoso de participar en los tres ataques que causaron la muerte de siete personas durante la noche del viernes en la ciudad de Fortaleza, capital del estado de Ceará (noreste), informaron fuentes oficiales.
El arresto se produjo en la madrugada de este domingo en un inmueble de un barrio de Fortaleza, donde además se encontraron tres armas de fuego, municiones y cargadores de pistola, señaló la Secretaría de Seguridad Pública de Ceará en un comunicado.
El sospechoso, con antecedentes por robo, estaba en el lugar y cuando los agentes llegaron intentó escapar, pero fue retenido antes de darse a la fuga.
La Policía consiguió identificarlo a través de su vehículo, un Fiat Punto, que había sido captado por las cámaras de seguridad ubicadas cerca de la sede de la Afición Uniformada del Fortaleza (TUF), donde se produjo uno de los ataques.
Dentro del automóvil encontraron cartuchos de bala, los cuales serán analizados para comprobar si son los mismos que los hallados en el lugar donde ocurrieron los tiroteos que acabaron con la vida de siete personas e hirieron a varias más.
Los ataques sucedieron casi de manera simultánea en tres puntos diferentes del barrio Benfica de Fortaleza y las autoridades investigan la posible conexión entre ellos.
El primer tiroteo se produjo en la concurrida plaza de "Gentilandia", un lugar al que acostumbrar ir jóvenes universitarios y que está repleto de bares y restaurantes.
A los pocos minutos, sospechosos tirotearon a un grupo de jóvenes que bebía cerca de la sede de la mencionada barra brava, uno de los mayores grupos ultra de ese equipo de fútbol del noreste brasileño.
Durante su fuga, los criminales tirotearon en una calle aledaña a otros dos individuos que vestían la camiseta de ese grupo, uno de los cuales falleció.
El estado de Ceará, uno de los más empobrecidos de Brasil, enfrenta, al igual que el de Río de Janeiro, una ola de violencia desde hace algunos meses que los cuerpos de seguridad atribuyen a ajustes de cuentas entre diferentes facciones criminales que operan en la zona.
