Un gran susto y crisis nerviosa provocaron este martes una serie de simulacros sobre cómo actuar ante asaltos bancarios en varias sucursales de la ciudad de San Luis Potosí, capital del estado del mismo nombre en México.
La alarma comenzó luego que se enviara vía WhatsApp un mensaje que rezaba: "¡Cuidado, se reporta robo a banco en avenida Carranza. Evite la zona!". Inmediatamente comenzó una fuerte movilización policial y el paso de ambulancias, informó la prensa mexicana.
Honduras: Reos sospechan que reciben comida con vidrio molido
Posteriormente, las autoridades informaron a través de un correo electrónico que se había tratado de una serie de simulacros, y que el responsable de este ejercicio fue el Seproban (Seguridad y Protección Bancarias).
Simulacro de robo masivo a bancos en San Luis Potosí causa pánico.
?? https://t.co/MWbEkHQiWu ? pic.twitter.com/Qm4fCUwJIZ— El Sol de Tampico (@elsolde_tampico) March 6, 2018
Lo que no se trató de un simulacro fue el asalto ocurrido en un aeropuerto de Brasil, donde una banda integrada por cinco hombres armados con fusiles invadió en la noche del domingo el aeropuerto de Campinas, ciudad en el interior del estado de Sao Paulo, y robó una carga de dólares por valor aún no determinado recién desembarcada de un avión procedentede Alemania, informaron fuentes oficiales.
Los asaltantes ingresaron al aeropuerto internacional de Viracopos, uno de los principales terminales de cargas de Brasil, por una puerta lateral y a bordo de una camioneta que contaba con los mismos adhesivos usados por la empresa de seguridad de la instalación.
La banda, al parecer informada sobre la mercancía, se dirigió al lugar en que un grupo de empleados del aeropuerto desembarcaba de un avión de la aerolínea alemana Lufthansa una carga que era acomodada en un carro de transporte de valores de la empresa Brinks.
Los asaltantes rindieron a los empleados responsables por la descarga, a los que encerraron en una furgoneta, y colocaron la carga en el vehículo utilizado para el robo, en el que huyerontras embestir dos portones de la salida.
Pese a que ni las empresas transportadoras ni la administración del aeropuerto divulgaron el contenido y el valor de la carga, agentes de la Policía Federal informaron de que se trataba de dólares.
