Habitantes de Santiago de Paraíso, provincia ubicada en Cartago – Costa Rica, sospechan que el niño que hace días desapareció de su vivienda y que 15 horas después apareció cerca de una quebrada fue escondido por duendes.
La noticia de que en Santiago de Paraíso había desaparecido un niño de 3 años sorprendió a todos los habitantes de Costa Rica el sábado pasado, aunque por dicha la historia tuvo un final feliz y Thiago Fonseca Rivera apareció a unos 400 metros de su casa, al lado de una quebrada, tras 15 horas de búsqueda.
El Ministerio de Seguridad Pública (MSP) informó que el menor se salió de la casa porque una hermanita dejó abierto el portón.
La desaparición del pequeño generó muchos comentarios, pues algunas personas no lograban explicarse cómo fue que el menor se perdió y señalan que los duendes fueron quienes lo escondieron todo ese tiempo.
Stephanie Lara, del grupo Cazadores de Mitos, es una joven que se encarga de analizar este tipo de fenómenos y comentó a La Teja que no sería nada raro que los duendes hayan tenido algo que ver en este caso.
Lara agregó que con base en los casos que han investigado, las horas preferidas de los duendes para “atacar” se inician a las 4 de la tarde y el pequeño Thiago se perdió a las 5 p.m.
Por su parte Octavio Casanova, que también estudia este tipo de hechos, explicó que los duendes no son hombres ni mujeres, sino individuos vivientes que habitan en zonas montañosas porque son considerados cuidadores de la naturaleza.
“Existen muchos tipos de duendes, hay puros, impuros, viciosos y virtuosos al igual que nosotros los hombres y mujeres”, comentó Casanova.
El experto contó que el comportamiento de estos personajes es similar al de un niño, por eso es que prefieren acercase a ellos, ya que se sienten más tranquilos con su presencia.
Asimismo Doña Katia Alfaro señaló que ella cree en los duendes, ya que cuando tenía 7 años vio uno en Miramar de Puntarenas.
“Yo iba con mi abuelo, ese día yo me le adelanté a él, cuando iba caminando me apareció el duende, era pequeño, él me vio. Cuando yo le iba a decir a mi abuelo, salió corriendo”, mencionó doña Katia.
De igual manera señaló que cree fueron los duendes quienes se llevaron a Thiago por unas horas.
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“Sí fueron ellos porque lo buscaron por todo lado y no apareció. Estaba muy cerca y nadie lo vio, no hay ninguna otra explicación ni teoría para pensar que no fueron ellos", dijo esta habitante de la zona.
Stephanie Lara reconoció que ella ha tenido contacto con los duendes al punto de que en su casa, en El Roble de Alajuela, instaló un altar para pedirles protección a estos amigos de la naturaleza.
En este altar siempre deja confites, pone inciensos, juguetes y hasta dinero. “Ellos entienden que somos amigos, también puse incienso de vainilla, de manzana y un vasito con miel. Ellos se llevan las ofrendas poco a poco”, manifestó Lara.
