Siete narcos llevaban cerca de una tonelada de cocaína escondida en la hielera de un barco. Los oficiales del Servicio Nacional de Guardacostas vieron la embarcación, les pareció sospechosa y decidieron revisarla.
A simple vista todo parecía normal; sin embargo, gracias a la malicia de los uniformados lograron dar con las pacas de droga, que estaban bien escondidas debajo del hielo.
El operativo se llevó a cabo este jueves en aguas del Pacífico sur, cerca de punta Burica, señaló La Teja.
El Ministerio de Seguridad Pública (MSP) informó que la embarcación, de nombre Marina Paola, tiene matrícula de Golfito.
Los agentes llevaron la lancha al puerto de Golfito para que oficiales de la Policía de Control de Drogas (PCD) la revisen detalladamente, ya que podría tener más cocaína escondida en otras partes.
En la embarcación iban tres ticos de apellidos Quirós, Castellón y Segura; tres ecuatorianos apellidados Estrada, Catuto y Achudia y un colombiano de apellido Valencia.
Todos fueron puestos a las órdenes del Ministerio Público y deberán enfrentar cargos por el delito de tráfico internacional de drogas.
En otro hecho, un hombre, de 44 años, fue detenido la mañana de este viernes por fingir y denunciar que unos desconocidos lo habían asaltado y encerrado en la cajuela de un carro, en San Miguel de Desamparados.
La captura del supuesto jetón ocurrió en las oficinas de la sección de Delitos Varios del OIJ, San José.
Según informó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), por medio de un comunicado de prensa, el sospechoso llamó el miércoles en la noche a un amigo desde su celular, diciéndole que unos hombres lo habían atacado.
El amigo dio aviso a las autoridades y cuando los agentes judiciales llegaron, se encontraron el sospechoso metido en la cajuela de un vehículo que, al parecer, le pertenece.
Luego de auxiliarlo, los oficiales llevaron el hombre a las oficinas del OIJ, para que pusiera la denuncia del ataque.
Los agentes empezaron de inmediato la investigación del caso, pero se dieron cuenta de que en realidad la historia del ataque era una aparente mentira.
