Un joven de 25 años fue asesinado a balazos por un vecino tras una acalorada discusión, pero habitantes de la zona en un acto de justicieros agredieron al criminal y le cortaron 6 dedos de las manos. El suceso se registró en la localidad bonaerense de San Martín.
El mutilado individuo pretendió refugiarse en el interior de un cementerio, aunque finalizó detenido por las autoridades policiales, sentenció en su portal Cronica.com.ar
Los voceros de los tribunales de San Martín revelaron que la infortunada víctima del ilícito fue identificada como Pablo Jesús Cardozo, de 25 años.
El hecho se produjo en el cruce de Maestro Dasso y José C. Paz, a unos 100 metros de la denominada Villa La Catanga, en el citado distrito, cuando el agresor, llamado Darío Nahuel, de 31 años, entabló una acalorada discusión con el muchacho. Trascendió que la disputa culminó en tragedia, ya que el asesino, con un arma de fuego, atacó a disparos a su adversario, quien cayó en un charco de sangre al ser gravemente herido en la región torácica.
Cardozo tuvo que ser trasladado de urgencia hasta el Hospital Municipal Diego Thompson, en San Martín, donde los médicos lo sometieron a una intervención quirúrgica, para salvarle la vida, pero este falleció a pesar del esfuerzo de los médicos.
Posteriormente los policías del Comando Patrulla de San Martín arribaron rápidamente al cementerio de la zona, que está situado en la esquina de Coronel Mom y Rivadavia, por una llamada de emergencias que los alertaba con respecto a un individuo provisto de un arma que tenía ambas manos ensangrentadas.
En un comienzo se creyó que este criminal había sido herido al explotarle accidentalmente el arma de fuego que utilizó para matar a Cardozo, aunque finalmente los médicos del lugar establecieron que le faltaban 3 dedos de cada mano. Al respecto los investigadores consideran que gente del humilde vecindario, en una acción de justicieros, mutiló al sujeto en represalia por haber baleado al muchacho.