Al menos 26 presos huyeron esta madrugada de una cárcel del estado brasileño de Mato Grosso, limítrofe con Bolivia y Paraguay, tras provocar una explosión en los muros del centro penitenciario de Mata Grande, informaron fuentes sindicales.
Según el sindicato de los servidores penitenciarios del estado de Mato Grosso (Sindspen-MT), la operación contó con la ayuda de un comando en el exterior que disparó contra los agentes de las torres de seguridad, explotó el muro y ayudó a la fuga de los 26 presos, de los cuales cinco fueron capturados de nuevo a las pocas horas.
Dos de los hombres que ayudaron desde el exterior también fueron detenidos con cinco armas -cuatro pistolas y una escopeta calibre 12- que fueron utilizadas en la fuga, de acuerdo con medios locales.
La secretaría de Justicia y Derechos Humanos del estado (Sejudh) apuntó que la explosión fue provocada por un artefacto, instalado en una bicicleta apoyada en el muro, que fue accionado a distancia, y permitió la destrucción parcial del muro lateral derecho, por donde salieron los presos.
La prisión de Mata Grande tiene capacidad para 828 presos, pero actualmente alberga a 1.300, lo que llevó a las mujeres de los internos a protestar el jueves en demanda de la mejora del sistema penitenciario. EFE
Contexto:
Un preso muere en Brasil tras pasar una semana con tres teléfonos móviles en el estómago
El recluso decidió tragarse los tres celulares para que no fueran descubiertos durante una revista en las celdas realizada el pasado mes de octubre.
Una semana más tarde, tras no haber podido expulsaros por el recto como pretendía y empezar a sentir fuertes dolores, buscó ayuda médica.
Después de someterlo a un examen de rayos X en el que se constató que tenía los tres aparatos en su estómago, los médicos le recetaron laxantes. Iba a ser operado, pero falleció antes de la cirugía.
