Un hombre de apellido Castillo, de 42 años, fue detenido por el OIJ como sospechoso de vender pan dulce para timar, asaltar y tocar a viejitas que se convertían en sus clientas.
La detención se dio la mañana de este miércoles en Dulce Nombre de Coronado, después de que los agentes habían recibido al menos 10 denuncias, por lo que desde hacía nueve meses lo empezaron a vigilar.
El arresto se dio cuando el hombre iba a salir de su vivienda con el carro cargado de bollitos de pan dulce.
Según el OIJ, el hombre andaba por distintos barrios de San José en busca de mujeres, sobre todo mayores de 70 años, a todas les metía el cuento de que vendía pan para ayudar a una iglesia.
Castillo se ganaba la confianza de algunas de ellas, con timos las convencía de que les diera algunas cosas de valor; cuando no lo lograba, aparentemente, sustraía las cosas, o amenazaba a las mujeres con puñal para robarles.
"En algunos casos decía frases y hacía tocamientos indecorosos con sus víctimas", informó el OIJ en un comunicado.
Durante el allanamiento, los agentes encontraron teléfonos, unos anteojos con doble lente de los que las víctimas hacían referencia, joyas, facturas de compra y venta.
El sospechoso fue puesto a las órdenes del Ministerio Público y el OIJ pide a otras posibles víctimas que se presenten ante el OIJ a denunciar.
Castillo ya ha sido investigado por robo, señaló La Teja.
En otro hecho, un taxista que prestó sus servicios para jalar drogas en lugar de clientes terminó cayendo en manos de la Fuerza Pública la tarde de este miércoles.
El hombre fue identificado como un costarricense de apellido Méndez, de 50 años, quien es vecino de Pococí, Limón, y que dentro de su carro llevaba 12 kilos de marihuana comprimida.
