El estudio de la Cepal detalló que las actividades y programas en materia energética evolucionaron en la región con diferentes grados de visibilidad en cada país.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) reconoció los avances realizados por países de la región en el marco político, normativo e institucional sobre estrategias que impulsen el ahorro energético, las cuales resultaron favorables en la mayoría de los casos.
El programa regional sobre la Base de Indicadores de Eficiencia Energética para América Latina y el Caribe (BIEE) busca generar indicadores específicos que determinen la evolución de políticas nacionales para la eficiencia energética, concepto que se refiere a la reducción de los costos y el uso de la energía sin desmejorar la calidad de vida.
A la fecha, 19 países de la región participan en el BIEE: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.
Los Gobiernos de Perú, Venezuela y Panamá, decretaron leyes para reglamentar la eficiencia energética, mientras que Guatemala, El Salvador, Nicaragua y República Dominicana elaboraron proyectos de ley en el área.
Uruguay publicó en 2009 leyes vinculadas a la eficiencia energética, así como un estatuto que conforma un fideicomiso para el financiamiento de proyectos en eficiencia energética. Por su parte, Chile cuenta con la Agencia de Eficiencia Energética, institución especializada en el tema.
Costa Rica cuenta con la ley de Uso Racional y Eficiente de Energía (UREE), la más antigua de la región, vigente desde 1994, seguida por las UREE de Brasil y Colombia en 2001.
La producción de energía renovable en América Latina y el Caribe alcanza el 20 por ciento del consumo energético frente al 18 por ciento mundial.
Según cifras de la Cepal, el consumo total de energía en América Latina fue de 2.8 por ciento con relación a un crecimiento de 3.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de la región.
Con respecto al consumo de energía por sectores, en México la industria consumió el 40 por ciento, mientras que en Bolivia, República Dominicana y Panamá se registró más del 30 por ciento, así como en Chile y Brasil.
El transporte consume más de 40 por ciento en Costa Rica y Ecuador. Por otro lado, el consumo residencial fue de 45 por ciento en Nicaragua, seguido por Uruguay y El Salvador con casi 30 por ciento.
Honduras hizo habitual el uso de paneles solares, lo que elevó el consumo de energía de la población, principalmente de aquella que no puede pagar los altos costos del servicio eléctrico.
Obstáculos para la eficiencia energética
El informe de la Cepal indicó que, pese a existir una mejoría con respecto a estudios anteriores, aún persiste la falta de continuidad por parte de instituciones gubernamentales en la promoción y el desarrollo de la eficiencia energética.
Además, los altos costos y la falta de disponibilidad de tecnologías especializadas dificultan el ahorro energético y limitan el acceso a la mayoría de la población.
El trabajo en conjunto con el sector industrial para lograr una mayor eficiencia en materia energética fue la conclusión obtenida en el VII Seminario de Eficiencia Energética realizado por la Organización Latinoamericana de Energía (Olade), celebrado en Uruguay en 2016.