Río de Janeiro, 6 oct (EFE).- Al menos diez adultos y dos menores fueron detenidos hoy en una gran operación de las Fuerzas Armadas y la Policía Civil contra el narcotráfico en el Morro de los Macacos, en la zona norte de Río de Janeiro, informaron fuentes oficiales.
Cerca de 1.000 agentes de la policía y las Fuerzas Armadas brasileñas rodearon a primera hora de la mañana la favela, situada en el barrio de Vila Isabel de Río de Janeiro, e ingresaron en ella para cumplir 31 mandatos de prisión contra narcotraficantes.
El megaoperativo contó con el apoyo de helicópteros y carros blindados para desarticular el en la comunidad, una de las más conflictivas de Río de Janeiro y donde en 2009, los narcotraficantes que la dominan derribaron un helicóptero de la Policía Militarizada y provocaron la muerte de cuatro agentes.
La Policía Militarizada realizó un trabajo de reconocimiento y espionaje en la favela durante tres meses, con la filmación de los narcotraficantes armados en puntos estratégicos de la comunidad, lo que sirvió para poder identificarles y pedir a la Justicia una orden de detención.
"Fue un excelente trabajo de inteligencia dentro de la comunidad, con filmaciones de personas armadas. En lugar de partir para el confronto, usamos la inteligencia, minimizando los riesgos", explicó el comisario de la Policía Civil Marcus Vinicius Braga, en rueda de prensa.
El principal objetivo de la operación de hoy era la detención de Leandro Nunes Botelho, alias "Scooby", considerado el jefe del narco en el Morro.
La policía considera que "Scoob" está vinculado con la guerra entre traficantes que se desató hace unas semanas en la Rocinha, la mayor favela de Brasil y que fue tomada por el Ejército durante días.
"Scooby", según el portal G1, habría participado de forma activa en el conflicto de la Rocinha aliándose alternativamente con los jefes del narcotráfico enfrentados en la favela.
Nunes Botelho estaba en busca y captura y se ofrecía por su paradero una recompensa de 30.000 reales (unos 10.000 dólares).
Precisamente en Rocinha, en la zona sur de Río de Janeiro, dos supuestos narcotraficantes murieron hoy en un tiroteo entre la policía y la banda criminal que controla la comunidad que dejó también a una adolescente de 16 años herida por balas perdidas.
El tiroteo se produjo una semana después de que las Fuerzas Armadas se retirasen de la comunidad, que ocuparon durante siete días con mil militares y diez blindados para poner fin a los intensos enfrentamientos entre bandas rivales por el control de la venta de drogas de la favela.
Durante los siete días en que las Fuerzas Militares cercaron la barriada, en la que viven unas 60.000 personas, las escuelas públicas y los puestos de salud de la comunidad estuvieron cerrados.