Piden educación sin prejuicios para prevenir embarazo adolescente en Perú

Lima, 26 sep (EFE).- Una educación sexual libre de prejuicios y espacios de atención médica exclusivamente para menores son algunas de las medidas que pueden contribuir a prevenir el embarazo adolescente en Perú, que afecta al 12,7 % de la población de 15 a 19 años, según explicó hoy una portavoz feminista en Lima.

 

Con ocasión del día internacional de la prevención del embarazo no planificado en adolescentes que se celebra mañana, la organización feminista Flora Tristán realizó un concurso de teatro en escolares del distrito de Villa El Salvador para hablar sobre los derechos reproductivos de los adolescentes.

"Es fundamental la educación que brinde el Estado, con un adecuado enfoque donde esté libre de estereotipos, libre de prejuicios, para que podamos hablar de la sexualidad de los adolescentes como algo normal y evitemos problemas, como tener una de las tasas más impactantes en la región por embarazo adolescente", explicó a Efe Liz Meléndez, directora del centro Flora Tristán.

El embarazo adolescente en Perú afecta al 23 % de adolescentes en la selva, al 22,7 % del área rural, y a 6,7 % de menores en Lima, la ciudad capital con 10 millones de habitantes, según datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).

El año pasado hubo 1.158 niñas de 11 a 14 años que fueron madres, donde 218 fueron en Lima y 149 en la región amazónica de Loreto, mientras que 55.330 jóvenes entre 15 y 19 años también dieron a luz.

El centro feminista organizó a cinco colegios de Villa El Salvador, uno de los distritos más populosos del sur de la capital, para que, a través de obras creadas por los estudiantes, envíen mensajes de prevención del embarazo, educación sexual, derechos humanos e igualdad a sus compañeros.

Actualmente, los contenidos sobre educación sexual impartidos en los colegios de Perú "están plagados de estereotipos" y "no abordan la sexualidad adolescente como una realidad, sino con un halo de tabú", que limita a los menores en su búsqueda de información, anotó Meléndez.

Asimismo, los centros de salud pública deberían tener un espacio diferenciado para atender a los adolescentes, pero al acudir "encuentran barreras, como actitudes simbólicamente sancionadoras", afirmó la experta, y la exigencia a las mujeres adolescentes de que vayan acompañadas por sus padres.