SAN JUAN (AP) — Las autoridades en Puerto Rico no lograban comunicarse con más de la mitad de las localidades en el territorio estadounidense en el Caribe, mientras se apresuraban a evacuar a decenas de miles de personas que viven río abajo de una presa dañada, y la magnitud del desastre provocado por el huracán María comenzaba a ser evidente.
Las autoridades iniciaron la evacuación de 70.000 personas en la zona de riesgo bajo la presa de Guajataca, en el noroeste de Puerto Rico, enviando autobuses para llevarse a la gente el viernes y publicando frenéticos mensajes de advertencia en Twitter que no vieron muchos de los residentes en una zona costera que se ha quedado sin electricidad.
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"Todas las áreas alrededor del río Guajataca deben desalojar AHORA. Sus vidas corren PELIGRO", advirtió el Servicio Nacional de Meteorología. "Todas las áreas alrededor del río Guajataca deben de evacuar AHORA. Sus vidas están en PELIGRO".
La presa de 316 metros (345 yardas), construida alrededor de 1928, contiene un embalse que cubre unos cinco kilómetros cuadrados (dos millas cuadradas). Casi 40 centímetros (más de 15 pulgadas) de agua cayeron en las montañas circundantes después de que el huracán de categoría 4 abandonara la isla el miércoles por la tarde, llenando el embalse.
Un ingeniero que inspeccionó el dique reportó una grieta contenida que las autoridades rápidamente determinaron era una fisura que podría ser el primer indicio de una falla total de la presa, dijo Anthony Reynes, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos.
"No hay manera de saber cuánto tiempo o qué pasará con esto. Por eso las autoridades están tomando medidas rápidamente, porque ellos también están viendo los peligros por todos los escombros. Esta es una situación muy, muy mala", dijo Raynes.
Carlos Bermúdez, portavoz gubernamental, dijo que las autoridades carecen de comunicación con 40 de los 78 municipios en Puerto Rico, más de dos días después de que el meteoro cruzó por la isla, donde derribó el cableado eléctrico y torres de telefonía celular, además de inundar calles.
Un total de 1.360 de las 1.600 torres celulares que tiene la isla se cayeron, y el 85% de los cables telefónicos y de internet estaban inservibles, señalaron las autoridades. Con los caminos bloqueados y los teléfonos muertos, reconocieron, la situación podría ser peor de lo que saben.
El gobernador Ricardo Rosselló dijo que todavía no pueden decir a ciencia cierta cuan extensos son los daños. Tampoco dijo cuándo sería restablecido el tendido eléctrico.
La cifra de muertos en Puerto Rico por el huracán María se mantenía en seis personas, aunque era probable que subiera.