Después de descubrir el alto coeficiente intelectual a decenas de niños en el país, el científico hondureño, Abrahán Rosa, ahora extenderá su proyecto de “niños genios” en El Salvador.
“Estamos trabajando para ir a organizarle al hermano país el proyecto genio, a petición del gobierno de esta nación y las autoridades educativas me lo han pedido”, aseguró Rosa.
Indicó que le hicieron la invitación, para reunirse esta semana con las autoridades de ese país, con el fin de implementar las escuelas de “genios” en todo ese territorio porque es un proyecto de nación a largo plazo.
“Ellos están interesados en un programa de largo plazo para el desarrollo del país, iniciando con niños de cuatro a cinco años de edad, en las áreas del conocimiento como lenguas, deportes, humanidades, físicos, químicos, matemáticos y posteriormente subir de nivel uno al cuatro donde ya los alumnos comienzan a hacer sus propios proyectos científicos”.
Según Rosa, el gobierno salvadoreño cuenta con sus propios recursos económicos para echar andar el proyecto de “niños genios”, refirió La Tribuna.
Al consultarle qué pasó con el plan que tenía para Honduras, manifestó que “ya teníamos inscrito 145 niños de varios departamentos del país, pero acá nunca se formalizó nada, porque se necesita el aval del gobierno y no se aprobó nada.
El académico explicó que la NASA, le había aprobado 20 millones de dólares para implementar las escuelas de “genio”, pero “al parecer esos fondos no se van a aprovechar en este país, y creo que los van a trasladar a Perú”.
La superdotación y las altas capacidades son conceptos todavía controvertidos y no exentos de polémica respecto a su significado, evaluación e intervención.
Todo el mundo sabe, sin embargo, que se trata de un término que se utiliza para designar a aquellos niños que poseen una alta inteligencia.
Otra cuestión es qué entendemos por inteligencia y como podemos medirla para establecer unos criterios fiables de identificación entre niños con aparentes buenas capacidades.
