Cuatro personas muertas dejó como resultado una balacera la noche de ayer jueves en la aldea Campamento Río Blanco, en Catacamas, departamento de Olancho, zona central de Honduras.
Las víctimas fueron identificadas como Silar Cruz Maradiaga de 34 años, José Armando Chavarría de 36, ambos fallecieron en el hospital de la zona.
Mientras que al momento del ataque murieron Wilmer Ramírez y otra persona identificada solo como Jerónimo, según informó La Tribuna.
El capitán de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) en esa zona, Jarvin Díaz, indicó que al lugar llegaron desconocidos fuertemente armados y las víctimas se enfrentaron a ellos.
Los familiares de las víctimas indicaron que sus seres queridos integraban el comité de vigilancia y que los atacantes llegaron haciendo disparos en la aldea, lo que provocó el enfrentamiento.
Las autoridades policiales investigan la escena del crimen para recabar evidencias que los conduzcan a los homicidas.
En otro caso, un joven empleado de un carro repartidor fue ultimado a tiros, supuestamente porque sus familiares no pudieron pagar una cantidad de dinero exigida por unos secuestradores en la colonia Vía Campesina, en Comayagüela, cerca del barrio El Chile.
La víctima es Osman Enrique Midence Delgadillo, cuyo cadáver fue encontrado en estado de putrefacción en las aguas del río Choluteca, a la altura de la colonia “Sagastume”, cerca de donde fue raptado por varios desconocidos, cuando andaba vendiendo agua a bordo de un camión cisterna.
Pero los malvivientes, antes de liquidar al joven, le realizaron varias llamadas a la madre de Midence Delgadillo, exigiéndole que les consiguiera 25 mil lempiras en efectivo para no quitarle la vida. Supuestamente al no recibir respuesta positiva a su solicitud de rapto, los malvivientes ultimaron al joven y luego lo fueron al lanzar al río.
”Me lo mataron el mismo día que lo secuestraron, yo los perdono y dejo todo en manos de Dios”, expresó su consternada madre, mientras retiraba el cuerpo del muchacho de la morgue capitalina.