La Paz, 8 jul (EFE).- La implementación de las nuevas tecnologías en las aulas educativas de América Latina no reemplazará el papel de los maestros, que deben convertirse en guías para el uso de toda la información generada con esos recursos, afirmó la directora de la Unesco para América Latina, Cecilia Barbieri.
"Está cambiando el acceso a la información, en el pasado era accesible a través de un docente, ahora el papel del docente es clave porque la tecnología no va a reemplazar al docente, hay un papel diferente", dijo en entrevista con Efe la jefa de la Oficina de Educación para América Latina y el Caribe de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Barbieri llegó desde Santiago de Chile a La Paz para participar en el octavo encuentro de Educación Alternativa y Especial organizado por el Ministerio de Educación de Bolivia, que tuvo invitados de Brasil, Ecuador, México, Chile y Costa Rica.
Barbieri sostuvo que la región está pasando por un proceso importante donde el profesor se vuelve un guía para los estudiantes para la buena utilización de la tecnología.
"Un estudiante necesita ser guiado, no toda la información es segura, entonces se tiene que procesar esa información para controlar las fuentes", insistió.
Según la directiva de Unesco, la formación de los docentes para utilizar las nuevas tecnologías en las aulas es importante y debe ser desde el inicio de sus estudios de docencia, ya que las nuevas generaciones de estudiantes manejan estas herramientas digitales.
Agregó que los docentes con esos conocimientos pueden crear contenidos digitales propios de cada región que es lo que hace falta en América Latina frente a todas las adaptaciones que se hacen.
"Falta la creación de contenido, en la región hay mucho contenido que entra, que se adapta, pero se tiene que producir más contenido local", señaló la italiana.
Barbieri destacó la importancia de la tecnología en la educación si se la usa con un objetivo específico y que su buena utilización puede ayudar a romper las brechas de desigualdad.
"El trabajo con la tecnología es potente porque seguramente puede romper esa brecha de desigualdad a través de la formación a distancia, a la conexión de acceso a la información, pero cuando entra al aula tiene que ser utilizada con un objetivo muy específico", aseveró la directora.
Todas estas transformaciones en la educación se deben a las nuevas necesidades de los "estudiantes del siglo XXI" que buscan adquirir conocimientos más cercanos a su realidad.
"El sistema se está transformando, la necesidad de los países se está transformando, el mundo se está transformando, entonces la educación como se enseñó en el siglo pasado no funciona ahora, entonces es un requerimiento de los jóvenes justamente aprender algo que sea mucho más cercano a su realidad", explicó Barbieri.
Es por eso que se potencia el trabajo en equipo, el pensamiento crítico y que puedan encontrar soluciones creativas a las dificultades de su realidad porque son conscientes de su entorno.
Barbieri señaló que los desafíos de la región en cuanto a educación tienen que ver con mejorar la calidad educativa y trabajar en disminuir las brechas de desigualdad.
Además, indicó que hay una nueva preocupación en la región que tiene que ver con la atención de la educación de personas adulto mayores y es necesario que los países realicen acciones y puedan cubrir también sus necesidades educativas. EFE