Los ciudadanos extranjeros, integrantes de las FARC-EP, podrán trabajar en cualquier actividad que deseen al obtener el visado especial, sin embargo, deben cumplir con sus obligaciones para evitar perderlo.
El Gobierno colombiano creó una "visa especial de paz" para los extranjeros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia–Ejército del Pueblo (FARC–EP) que desean radicar en el país, luego del desarme y el tránsito a la legalidad acordado con el Ejecutivo.
El decreto 831 publicado por la Presidencia expone que la visa podrá ser otorgada "a los ciudadanos extranjeros miembros de las FARC-EP, que se encuentren en los listados entregados por representantes de dicha organización y verificados por el Gobierno".
Los titulares de este visado, que para obtenerlo deberán estar en los listados entregados por las FARC-EP en el marco del pacto de paz firmado en noviembre, podrán además "optar por la nacionalidad colombiana" en los términos habituales.
El extranjero que obtenga la "visa especial de paz" estará autorizado a ejercer cualquier ocupación, sea bajo contrato laboral o no.
El decreto 831 estipula que la visa caducará ante una ausencia del territorio colombiano por más de dos años continuos.
Además, señala que el extranjero podrá perder esta visa especial de no cumplir con lo pactado en términos de verdad y reparación a las víctimas del conflicto, así como de reincoporación a la vida civil.
También le será cancelada si el extranjero presenta documentación falsa para obtenerla y si comete delitos penales posteriores al 1 de diciembre de 2016, cuando quedó refrendado por el Congreso el acuerdo firmado entre las FARC-EP y el Gobierno de Juan Manuel Santos.