Dos policías fueron asesinados este martes en Colombia presuntamente como parte de un plan del crimen organizado contra las autoridades, que desde finales de abril deja 12 muertos, entre ellos dos civiles, informó la Policía.
El uniformado Deivis David Cárdenas, de 34 años, fue asesinado en Sincelejo, departamento de Sucre (norte), cuando delincuentes a bordo de una motocicleta atacaron una patrulla policial, indicó la autoridad en un comunicado.
Cárdenas fue trasladado a un hospital, en el que "su situación médica se agravó y falleció", agregó. El ataque también dejó una mujer herida, que fue atendida en un centro médico.
Las autoridades atribuyeron el hecho a "la estrategia del crimen organizado" de atacar a los policías en calles y vías en un "acto desesperado" para que "bajen la presión contra los cabecillas de estas organizaciones, quienes se encuentran huyendo entre el monte".
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Según la Policía, el Clan del Golfo, principal banda criminal del país, y otras organizaciones delincuenciales decretaron un "plan pistola" para atacar a la fuerza pública.
Desde finales de abril han sido asesinados diez policías y dos civiles, como parte de esta operación delictiva, según el ministerio de Defensa.
La otra muerte ocurrió la madrugada de este martes en el municipio de Segovia, departamento de Antioquia (noroeste), donde perdió la vida el subintendente Wilver Muñoz.
El uniformado recibió un disparo de fusil de dos hombres que se transportaban en motocicleta, mientras este hacía labores de patrullaje, dijo a AFP una fuente policial.
En esta zona también opera el Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevaristas), única guerrilla activa de Colombia y la cual negocia la paz con el gobierno, explicó.
El Clan del Golfo surgió de remanentes de grupos paramilitares desmovilizados en 2006 a impulsos del gobierno y se dedica al narcotráfico, la minería ilegal y la delincuencia común.
En lo corrido del año, la Policía ha capturado a más de 1.300 miembros de esta banda y abatido a 52 de sus cabecillas.
