El exgobernador del estado mexicano de Veracruz Javier Duarte, detenido el sábado en Guatemala con una orden de captura internacional, estaba en el país centroamericano desde el pasado noviembre, cuando ingresó ilegalmente por vía terrestre.
El jefe de la Agencia de Investigación Criminal de la Procuraduría General de la República de México (PGR), Omar García Harfuch, informó hoy de esto en una rueda de prensa en la capital guatemalteca, junto al representante jurídico y de asuntos internacionales de la PGR, Alberto Elías Beltrán, entre otros.
Duarte, de 43 años y quien guarda prisión provisional en una cárcel que funciona en el Cuartel Militar Matamoros, en la capital, tenía una orden de captura con fines de extradición por su supuesta responsabilidad en la comisión de delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Las autoridades empezaron a sospechar de manera firme que el político estaba en Guatemala desde el 10 de noviembre, cuando la Policía Federal mexicana arrestó a Mario Medina Garzón en el aeropuerto internacional de Tapachula, en el estado suroriental de Chiapas, con dos pasaportes falsos que llevaban fotografías del exgobernador y de su esposa.
Medina, que está procesado y en libertad, era una de las personas que supuestamente ayudaba a Duarte, pero las autoridades mexicanas, en un trabajo coordinado con las guatemaltecas, creen que hay otro grupo de personas en Guatemala -a las que no identificaron- que lo ayudaba y le facilitaba viviendas en varias ciudades, como Antigua.
Entre ellas estaría el apartamento de Panajachel, en el que estaba desde hacía dos días y sin casi salir de su habitación, aunque fue detenido en la recepción de un conocido hotel del municipio el sábado a las 20.00 hora local (02.00 GMT del domingo), justo debajo de donde se hospedaba, un inmueble a nombre de una tercera persona sin identificar.
García y Beltrán, que dijeron no poder dar mayores detalles de la investigación por estar en curso, insistieron en varias ocasiones en que los miembros de su familia que estaban con él, a los que no identificaron, no tienen ningún proceso por ahora en su contra y que por ello es necesario preservar su identidad.
Según las leyes guatemaltecas, la PGR tiene un plazo máximo de 60 días para presentar las pruebas de la acusación contra el exgobernador de Veracruz en las que se basa la petición de captura y extradición, un extremo que se inició ya este sábado.
La Fiscalía guatemalteca deberá presentar a un juez competente la petición formal de extradición cuando la reciba, y este deberá convocar a una audiencia judicial para resolver la solicitud y luego trasladar el expediente a la Cancillería para que tramite la entrega a las autoridades mexicanas si el juzgador así lo decreta.
La detención de Duarte fue ordenada el 14 de octubre de 2016 por un juez del Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio del Centro de Justicia Penal Federal, en la Ciudad de México, y desde el 14 de noviembre tenía una alerta roja de la Interpol.
El exgobernador, que supuestamente recibía ayuda de algunas aerolíneas para sus traslados, está acusado de diversas operaciones con recursos de procedencia ilícita, de efectuar contratos a empresas fantasmas y de utilizar "prestanombres" para transferir recursos públicos.
Entre 2012 y 2015 Duarte desvió grandes cantidades de recursos públicos los cuales utilizó para adquirir bienes inmuebles tanto en México como en el extranjero, de acuerdo con las autoridades de su país.
Por su parte, el encargado de negocios de la embajada de México en Guatemala, Luis Ángel Domínguez, dijo que la sección consular visitará a Duarte si éste lo solicita.
Duarte, expulsado del Partido Institucional Revolucionario (PRI) en octubre pasado y prófugo desde noviembre antes de acabar su mandato el día 30 de ese mes, está recluido en el Cuartel Militar Matamoros desde esta madrugada, concretamente desde las 2.30 (6.30 GMT).