Wellington, Nueva Zelanda | AFP | Nueva Zelanda rindió homenaje el lunes a las víctimas de la erupción volcánica de White Island con un minuto de silencio, una semana después de la catástrofe que causó 18 muertos.
En todo el archipiélago, los habitantes observaron un minuto de silencio a las 14H11 (01H11 GMT), la hora en que el volcán entró en erupción.
Las banderas estaban a media asta en el exterior del Parlamento neozelandés, en Wellington, donde la primera ministra, Jacinda Ardern, interrumpió una reunión de su gobierno para el mantener el minuto de silencio.
"Dónde sea que se encuentren en Nueva Zelanda, o en el mundo, es un momento en el que podemos estar al lado de los que perdieron a sus familiares en esta tragedia extraordinaria", dijo la jefa de gobierno el sábado al anunciar esta iniciativa.
Como muchas de las víctimas eran de Australia, el primer ministro australiano, Scott Morrison, anunció que sus compatriotas también mantendrían un minuto de silencio.
El alcalde de Whakatane, la ciudad más próxima a White Island, anunció que las autoridades habían trasladado en barco a las familias de las víctimas, a distancia del volcán, para este instante de recogimiento.
Las víctimas
Unas 47 personas se encontraban en Whakaari, también conocida como White Island, cuando ocurrió la erupción, de las cuales 16 han sido confirmadas muertas, la última de ellas el domingo en un hospital de Australia, mientras los equipos de rescate buscan a dos desaparecidos en el mar.
Otras 14 personas siguen ingresadas con quemaduras graves en hospitales de Nueva Zelanda, la mayoría de ellas en condición crítica y otras 12 luchan por sus vidas en los hospitales de Australia, a donde fueron trasladados.
Autoridades investigan
El Whakaari entró en erupción el 9 de diciembre pasado cuando se encontraba en un estado de alerta 2 de una escala de 5 que preveía leve actividad volcánica. La erupción tomó por sorpresa a 24 australianos, 9 estadounidenses, 5 neozelandeses, 4 alemanes, dos chinos, dos británicos y un malasio que se encontraban de excursión.
La Policía ha abierto una investigación para determinar la responsabilidad por el suceso, incluidos los operadores turísticos que organizan viajes a esta isla, visitada por más de 17.500 personas en 2018.