Seis personas, cuatro de ellas niños, murieron en la explosión de un artefacto recogido por un buscador de metales en el estado de Borno, en el noreste del país; una zona con presencia yihadista, informaron fuentes concordantes de Nigeria a la AFP este domingo.
La bomba casera estalló el sábado, cuando dos chatarreros estaban clasificando restos recogidos a las afueras del pueblo de Gubio, a 80 km de la capital regional, Maiduguri; indicaron las fuentes.
«Seis personas murieron en la explosión, dos hombres y cuatro niños que eran alumnos de un seminario islámico de cerca de allí»; dijo Mali Bulama, administrador político del distrito de Gubio.
Según él, todavía se está investigando la identidad de los dos adultos, cuyos cuerpos acabaron despedazados por la explosión, que tuvo lugar en un almacén situado en un edificio en obras.
Seis muertos por una explosión en el noreste de Nigeria
«Los buscadores de metal estaban clasificando los metales, en busca de posibles objetos de valor, cuando sacaron el artefacto explosivo improvisado de uno de los sacos y este explotó, matándolos a ellos y a cuatro niños que estaban jugando cerca»; indicó el líder de una milicia, Babakura Kolo.
Umar Ari, otro miembro de la milicia, confirmó ese balance.
La violencia yihadista, que asola el noreste de Nigeria desde hace 14 años, se ha cobrado 40.000 vidas y ha forzado a unos dos millones de personas a abandonar sus hogares, obligándolas a instalarse en campamentos improvisados y a depender de la ayuda internacional para sobrevivir.
Muchos de los desplazados peinan el monte en busca de leña y chatarra para conseguir dinero, y suelen estar en la mira de los yihadistas, que los acusan de espiarles para el ejército y milicias rivales.