Conmoción y repudio causó una noticia en una zona rural de Medellín, Colombia. Una monja fue hallada golpeada y con signos de abuso sexual. Posterior al abuso le sustraen varios objetos de valor, incluyendo una tarjeta bancaria.
El hecho se dio a conocer este martes 23 de enero y tuvo lugar en el corregimiento de San Cristóbal, occidente de la capital antioqueña. La religiosa, de acuerdo con las autoridades, estuvo en zona boscosa y tenía múltiples signos de tortura y violencia sexual.
La mujer, de unos 30 años, fue hallada amarrada de manos. «Al llegar a la zona nos encontramos con que la religiosa recibió agresión física y se presentó el hurto de unas tarjetas débito”; le dijo el comandante de la Policía Metropolitana, general Óscar Lamprea.
También se adelantaron las actividades de recolección de material probatorio para lograr establecer al responsable o los responsables de este hecho.
Por su parte, desde la Alcaldía de Medellín, Colombia activaron el Código Fucsia para brindar toda la atención que requiera la víctima de agresión sexual.
«Realizamos un análisis de su red de apoyo para acompañarles y buscamos asegurar una denuncia que permita su acceso a la justicia, además estamos evaluando criterios para remitirla a otros mecanismos de la Secretaría de las Mujeres para su protección y acompañamiento», expresó Valeria Molina, secretaria de las Mujeres de Medellín.
La monja torturada en Colombia está en cuidados intensivos
Según la información de las autoridades, a la religiosa de 30 años la llevaron al hospital Pablo Tobón Uribe. Allí, además de iniciar una serie de exámenes para establecer el estado de salud de la mujer, fue internada en una Unidad de cuidados Intensivos.
Con los exámenes médicos, además de establecer si hubo acceso carnal por parte de los criminales que la atacaron, se busca definir si le suministraron algún tipo de sustancia para ponerla en estado de indefensión.
“Se le están haciendo los diferentes exámenes y al parecer fue abusada sexualmente”; dijo comandante operativo de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, coronel Eddy Javier Sánchez, citado por el medio local El Colombiano.
