Este día se recuerda los brutales asesinatos masivos y la persecución sin precedente que desató Herodes, hace más de 2 mil años contra los recién nacidos.
“El martirio de los inocentes son consecuencias del orgullo, del afán de dominio de poder del Rey Herodes en su tiempo, porque cuando nace el Mesías, aparecen en muchas partes de oriente, científico, estudioso, magos que les llamaban, guiados por una estrella, buscando a ese Rey, a ese Mesías que iba a venir a liberar, a salvar, a reconciliar al mundo con Dios y con la humanidad", dice el Padre Antonio Castro, párroco de la Iglesia de la Merced.
"Entonces estos científicos van, buscan, guiados por la estrella, llegan al palacio de Herodes donde él se sobresalta y se asusta porque siente que va a perder su poder, su dominio, entonces llama a los sabios, a los estudiosos de las sagradas escrituras a que investigue y realmente le dicen que sí, que es cierto que van a nacer en Belén, que así estaba anunciado”, citó.
“Herodes decide ordenar un decreto de ley de asesinar a todos los niños de 0 a 2 años de edad, mientras tanto, ya José había sido anunciado por un ángel que se levantara, que tomará el niño y a su mamá y que huyeran a Egipto, porqué Herodes lo buscaba para asesinarlo, al verse burlado, Herodes mandó matar a todos los niños, es el origen de los primeros mártires, diríamos mártires de la fe de Cristo, de la causa del Reino de Dios, la causa de Jesús”, recuerda el sacerdote.
“Herodes provocó sangre derramada de inocentes, de niños limpios, esto no es ajeno a nuestros tiempos de hoy, precisamente es la reflexión, cuántos Herodes de hoy vemos en este tiempo, en estos nuevos tiempos que los niños de Centroamérica especialmente tienen que emigrar porque el Herodes actual lo está matando de hambre”, indicó.
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“Cuando separan a los niños en los Estados Unidos, cuando lo separan de sus madres de sus padres y crecen niños en un albergue en un centro de niños huérfanos o abandonados, sin conocer a sus padres, sin ninguna identidad y entonces qué es lo que tenemos que hacer los cristianos y las instituciones de defensa de los derechos de los niños, tratar de con la ley en la mano, con los recursos, tratar de rescatar para devolver al niño el derecho que tiene a la vida", expresó.
"En primer lugar el derecho que tiene a que se respeten sus derechos de tener una identidad, de tener una familia, de tener una escuela, una salud, una educación, una estabilidad económica, emocional familiar y eso es lo que están sufriendo mucho miles de niños hoy de nuestra Centroamérica”, reflexionó el Padre Castro.
“Por ejemplo cerramos el año en Nicaragua con 135 mil nacidos, es un signo de alegría, signo de unidad, especialmente para los pobres, los poderosos por supuesto se incomodan, se sienten mal, se escandalizan por qué está haciendo niño para prepararlo, para realizarle un futuro mejor del que nosotros hemos recibido, entonces podemos y debemos conmemorar el Día de los Inocentes, devolviéndole a nuestros niños esa inocencia”, sostuvo el padre de la iglesia la Merced.