El presidente de EE.UU, Donald Trump, eliminó las restricciones de la ayuda exterior a Bolivia y consideró a este país andino "vital para los intereses" de Washington.
En un memorándum, del que se hace eco la agencia Efe, y dirigido al secretario de Estado, Mike Pompeo, Trump destacó la importancia de la asistencia a ese país en el año fiscal 2020 para la nación americana.
El presidente estadounidense apoyó desde el primer momento al gobierno de facto en Bolivia, encabezado por Jeanine Áñez, tras el golpe de Estado y la renuncia forzada del presidente Evo Morales el pasado 10 de noviembre.
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Pocos días después, el mismo mes de noviembre, el encargado de Negocios de la embajada de EE.UU. en Bolivia, Bruce Williamson, manifestó el deseo de Washington de "fortalecer" las relaciones con La Paz, y consideró que el eventual retorno a esa nación de la estadounidense Administración para el Control de Drogas (DEA) dependería del gobierno "interino".
La dictadura de Áñez, Camacho y Mesa vuelve a superar sus propios límites de cinismo y descaro. Ahora se inmiscuye en los asuntos internos de #Venezuela y sus instituciones, dejando en evidencia que son una vulgar extensión de la errática política exterior de #EEUU.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) January 6, 2020
En agosto 2019, Trump incluyó a Bolivia y Venezuela en la lista de países que incumplieron sus obligaciones internacionales en la lucha contra las drogas. Morales denunció entonces que EE.UU. usaba la política antidrogas como "un mecanismo de control geopolítico" basado en "la imposición" y para inmiscuirse en "la política interna".
Tensas relaciones
Durante la administración de Morales, las relaciones entre Washington y La Paz fueron tensas. En 2008, el mandatario boliviano expulsó al entonces embajador norteamericano, Philip Goldberg, acusándolo de injerencia en asuntos internos.
Después, en noviembre de ese mismo año, Morales le dio un plazo de tres meses a los funcionarios de la DEA para que abandonaran el territorio boliviano, y en 2013 expulsó a la representación de la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID, siglas en inglés).
Once años después de la ruptura de las relaciones diplomáticas, el pasado 26 de noviembre, el Gobierno de facto de Bolivia nombró a Walter Oscar Serrate Cuéllar como embajador de EE.UU. en Bolivia, informó RT.
