El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidad celebró un debate abierto en relación con el tema del programa "Mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales".
En este debate Nicaragua estuvo presente a través del Canciller Denis Moncada Colindres, quien reiteró que "Nicaragua se asocia a la declaración realizada por la República de Azerbaiyán en nombre del Movimiento de los Países no Alineados", además de resaltar que dicha reunión "representa una oportunidad histórica que permite reflexionar, reafirmar y defender el compromiso de los Estados con la vigencia de los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, en vísperas del 75 aniversario de su fundación".
El Cro. Clolindres además hizo énfasis en los recientes acontecimientos mundiales que confirman "que nos encontramos al borde del límite crítico de la civilización y que la anhelada Paz entre los Estados y los Pueblos se encuentra en una peligrosa inseguridad ascendente, por el terrorismo de estado, agresión a la soberanía y violación al Derecho Internacional".
Nicaragua, como todo el tiempo, demostró su postura en contra de la violación a los Derechos Humanos y a la soberanía de los Pueblos. Continuando con su discurso, el Canciller Denis Moncada, refirió que "los pueblos amantes de la Paz siempre rechazamos el lenguaje de agresión y de guerra, ningún Estado puede atribuirse el uso de la amenaza, del uso de la fuerza en las relaciones internacionales, estas políticas de excepcionalistas, violatorias del derecho internacional no ayudan a resolver los conflictos de forma pacífica, por el contrario empeoran y tensionan la situación internacional".
"En varias oportunidades Nicaragua ha expresado su rechazo y condena a las acciones ilegales dirigidas a cambiar gobiernos democráticos por la vía de hecho, rompiendo el orden constitucional y desembocando en violencia generalizada, acciones que tienen como finalidad llevar a golpe de Estado, para derrocar gobiernos legítimos, electos por la voluntad popular", continuó declarando el Canciller.
"Por que anhelamos la paz y creemos en la prevención y solución de controversias por medios pacíficos e inclusivos, rechazamos las políticas injerencistas y agresivas, así como la imposición de medidas económicas y coercitivas unilaterales o sanciones violatórias del Derecho Internacional", manifestó el diplomático representante de Nicaragua.
"Reiteramos que América Latina y el Caribe es una zona de paz, en la cual Nicaragua sigue siendo un importante factor de estabilidad, paz y seguridad, seguiremos fundamentando nuestras relaciones internacionales en la amistad, solidarias y reciprocidad entre los pueblos, condenamos el terrorismo de Estado, la violación a la soberanía de los países y el derecho internacional", continuó.
Durante su discurso, además dejó en claro la confianza que Nicaragua le otorga a la Corte Internacional de Justicia para dar salida a los diferentes conflictos que se den entre las naciones, "Otorgamos particular importancia a la Corte Internacional de Justicia, quien tiene nuestra plena confianza y cuya labor construye a la seguridad mundial en la promoción de arreglos pacíficos de las controversias".
"Naciones Unidas deben cumplir con su papel histórico de propiciar respeto, seguridad, soberanía e integridad territorial trabajando en pie de igualdad", manifestó.
El Canciller no olvidó mostrar la preocupación de Nicaragua ante los recientes hechos de violencia que se han suscitado en diferentes naciones, "expresamos nuestra preocupación y consternación ante recientes acontecimientos que violan la soberanía e integridad de Estados, asesinando selectivamente a lideres de países miembros de esta organización".
"Nicaragua invita a la comunidad internacional a cumplir con los anhelos que nos planteamos hace 75 años, a trabajar unidos en solidaridad, cooperación y con respeto a la Carta de las Naciones Unidas para erradicar la guerra y la pobreza", declaró.
Para finalizar, el Canciller, dio lectura al mensaje de nuestro Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, "Desde nuestra Nicaragua siempre bendita y siempre libre, un saludo lleno de buena voluntad y trabajo, por un mundo dialogante, razonable, pacífico y mejor en todos los sentidos, para todos los gobiernos y pueblos del mundo. La humanidad merece los más grandes esfuerzos y oraciones para vivir con respeto, entendimiento y paz".
