A pocos días de darse el estreno de Diablo IV, muchos de sus seguidores aún se hacen la pregunta de uno de los personajes más importantes del juego y en su nueva historia; ¿Quién es Lilith?.
Sin embrago, muchos jugadores saben perfectamente quién es y entienden gran parte de su importancia y trasfondo, en cambio otros nunca han podido jugar antes a Diablo, por lo que no tienen ni la menor idea quién es este personaje.
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Lilith es la hija del Odio y es una de las creadoras de Santuario. De base, Lilith se presenta como una entidad que provocó una rebelión contra el orden preestablecido, pues pretendía romper el funcionamiento del mundo en favor de su propia visión. Su diseño, tal y como explican desde Blizzard, expresa «su naturaleza dual, encarnando tanto el mal como una mentalidad progresista».
Como tal, Lilith es una de las creadoras de Santuario junto con su antiguo amante, ahora némesis, Inarius. Juntos buscaron y obtuvieron la Piedra del Mundo, creando mediante su poder un reino utópico al que, en efecto, llamaron Santuario. Su destino era ser un «refugio idílico destinado a escapar de la incesante lucha entre el Cielo y el Infierno», pero Inarius la engañó y se vinculó a la piedra, aumentando enormemente de poder.
Diablo IV encuentra la complicada relación entre Lillith e Inarius
Ambos yacieron juntos, dando lugar al nacimiento de los Nephalem, siendo estos los ancestros de la propia humanidad. Por desgracia, su existencia alteró el orden de Santuario. Ahí aparecieron los Prime Evils, quienes iniciaron su persecución y destrucción. Viendo como sus hijos eran asesinados, Lilith inició una auténtica matanza, lo que provocó que Inarius la acabase desterrando.
Ahora, 50 años después, Lilith ha regresado del exilio del Vacío (un lugar que terminó de corromper su mente), provocando que, en su regreso, haya vuelto para ejecutar su ley. «En el corazón de Diablo IV se encuentra la complicada relación entre Lillith e Inarius. Aunque el amor no es el objetivo principal, su historia explora los orígenes de su vínculo y la tragedia que llevó a su transformación en odio.
Su conexión se basa en un sueño compartido, una visión metafórica de la creación de un mundo y una nueva humanidad. Sin embargo, a medida que sus ambiciones chocan e Inarius se da cuenta de la verdadera naturaleza de la esencia demoníaca de Lillith, su relación se desmorona bajo el peso de sus diferencias», ha explicado Sebastian Stepien, director creativo del juego, sobre el tema.
