Una joven mujer cumple su sueño de ser una microempresaria en Bilwi, Caribe Norte; al desarrollar diferentes emprendimientos con su propio lema: “Pon tus metas en las manos de Dios, sé perseverante y cumplirás tus sueños”.
Ella es Naida Castillo, una joven miskita de la ciudad de Bilwi, que desde muy temprana edad organizó ideas para emprender y así un día llegar hacer ser una empresaria exitosa.
“Recuerdo que yo estaba en la secundaria, mi madre tiene una tienda de ropas en el mercado municipal y allí es donde todo inicio”; explica.
Estudiando su último año de la carrera de administración de empresas en la universidad BICU y con todas esas ganas de salir adelante, inició con su primer emprendimiento; una tienda de ropa y calzado en el mercado municipal.
Ejemplo de superación de una mujer en Bilwi
“Yo me iba temprano al mercado a limpiar y cuidar. Luego a las 11 de la mañana regresaba a casa para alistarme para ir a la escuela, así fue que me fui relacionando con la gente del mercado y me gustó mucho. Ahí todos somos una familia”; explicó la joven.
Así también detalló que “mi mamá me ayudó con mi primer tramo de ropas, el cual fue la primera de la entrada de la reconocida tienda Burnel Hall en el mercado. Fue un diciembre 22 que por primera vez fui a Managua a comprar mi propio producto».
Hoy esta joven es un ejemplo a seguir cuenta en Bilwi, con dos tiendas de ropa y calzado, “Variedades Mell”; donde se ofrece ropa nueva y de segunda.
“Abrí mi página en Facebook y publiqué las fotos de mis productos (…) llegué a vender más en línea que en la propia tienda, pero con el tiempo la gente se acostumbró y comenzaron en pedir en público”; afirma.
De vender ropa a propietaria de restaurante
Pero el emprendimiento en ropa y calzado no quedo allí, ahora con más experiencia y con el apoyo de su marido, surgió la idea de un restaurante familiar en Bilwi.
“Un día estábamos almorzando, mis dos hijos y mi marido en el patio de la tienda de ropa, el cual tenía un amplio terreno. Mi hijo me dijo mami porque no hacen un cafetín, y mi marido dijo, bueno idea, y así surgió la idea»; comenta la joven visionaria.
«Después de un cafetín se volvió en un restaurante familiar que superó mis expectativas. Tuvimos apoyo del MEFCCA con un bono y capacitaciones, así también del INTUR quien capacita a los trabajadores»; indicó.
Hoy “Restaurante Familiar Equina del Sabor” es un punto de referencia para pasarla en familia.
Sin dunda es una mujer multifacética, madre de familia, microempresaria, quien también trabaja en una organización de pueblos indígenas en Bilwi.
