¡Ese día morí y volví a nacer! la historia de un motociclista en Masaya

¡Ese día morí y volví a nacer! la historia de un motociclista en Masaya
Foto: ¡Ese día morí y volví a nacer! la historia de un motociclista en Masaya/ TN8

Sometiéndose a un largo, incómodo y doloroso proceso de alargamiento de una de sus extremidades inferiores se encuentra Jimmy García Álvarez de 36 años; este difícil momento es debido al impacto que sufrió por un vehículo, en la entrada de Las Hamacas, en Masaya hace 10 meses. «Yo no traía casco»; señaló.

Tomado fue que me crucé sin fijarme al mismo lado en la carretera y fue ahí donde se dio el accidente a eso de las 3 de la mañana cuando yo me intenté levantar el pie lo tenía fracturado y con los huesos de fuera»; continuó Jimmy.

 

«Lo que yo sentía era como que me habían desgarrado, y lo único que decía era que me cortaron la pierna, que me cortaron la pierna por el dolor que no aguantaba»; manifestó.

«A veces no podía dormir del dolor, era frustrante, me dolía hasta la pelvis y pasaba sentado; fue traumático porque te tienen que limpiar diario, por la cantidad de puntos»; argumentó nuestro amigo.

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Las varillas que atraviesan su piel y penetran su hueso lo han acompañado durante todo este tiempo. El año 2022 se detuvo para Jimmy. Este proceso lo llevo a valorar el amor de sus seres queridos sobre todo el de su madre. «Pasar por esta situación yo no sé la deseo a nadie, antes de esta operación yo decía que quería mejor que me hubieran cortado el pie, a veces decía que prefería haberme muerto»; dijo.

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«Como todo ser humano, cuando estamos bien no nos acordamos de Dios hasta que estamos pasando por una situación bastante compleja, empezamos a clamar y yo ya no aguantaba y le pedí que me ayudara con este dolor que ya no podía»; agregó Jimmy.

Para el psicólogo Erick Reyes, los accidentes en los que personas ven comprometidos sus miembros, sufren secuelas a largo plazo, tales como temporadas de temores y ansiedades.

Situación difícil para joven en Masaya

«Entre más saque el dolor más se va a liberar, es como una olla de presión; si yo la tapo y la dejo con más calor, tarde o temprano va a explotar; y el problema es que esas emociones que está viviendo la persona pueden tener un impacto negativo. Vemos como la gente cuando está sufriendo, y este gesto que bien intencionado transmite la idea de decir estás hecho paste, pero sería mejor un abrazo para esa persona que está viviendo ese momento difícil»; dijo el especialista.

Reyes asegura que el mayor riesgo para enfrentar una situación como la de estar es la soledad o no contar con una red de apoyo para salir adelante. «Cuando tú tienes una razón para salir adelante mucho más fácil para las personas encontrar en su foro íntimo en su interior la fuerza, para sobrellevar una situación tan traumática cómo está»; añadió el especialista.

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Sin duda Jimmy no solo perdió una parte de su cuerpo, sino su esencia. «No vale la pena andar en motocicleta arriesgando su vida cuando tenemos hijos una familia que pueda quedar rota por nuestros malos pensamientos»; finalizó García.

Hoy está floreciendo a través de la resiliencia, la fuerza, la fe, la esperanza y la antifragilidad.