Luego de una noche muy caliente con su esposa, los doctores diagnosticaron a un hombre oriundo de Indonesia con una condición bastante inusual en su miembro viril.
Se trata de la “deformidad de berenjena”. Él se dio cuenta de que algo no estaba bien con su miembro viril tras observar cierta hinchazón, luego de haber tenido relaciones sexuales con su esposa.
El caso del hombre quedó registrado en el Internacional Journal of Surgery Case Reports. En el informe, las autoridades médicas de esta institución señalan que la lesión corresponde a un “caso de fractura severa de pene asociada a relaciones sexuales”.
De manera que, el hombre, que tiene 50 años de edad, atendido en el Hospital General Dr. Soetomo, en la zona de Java Oriental, Surabaya.
Según testimonio del paciente y conclusiones del médico, este habría estado en pleno coito cuando sintió un “crack” en su zona genital; por lo que perdió su erección, sufrió sangrado uretral y perdió la capacidad para eyacular.
Condición bastante inusual en su miembro viril en un hombre
Uno de los exámenes que se le realizó reveló que su miembro viril se había puesto de color dorado y tenía una clara desviación hacia la derecha, parecido a un signo de interrogación. Dicha forma fue corroborada con las radiografías.
Asimismo, el miembro presentaba un hematoma con coágulo de sangre que alcanzaba la distancia desde la punta del pene hasta el escroto. Esta lesión incluso pudo haber impedido el paso de la orina si no se atendía a tiempo.
Los médicos concluyeron que el hombre tenía “deformidad de berenjena”, una condición que muestra una torcedura del pene debido a un traumatismo. Según especificaciones de los especialistas, esto ocurre generalmente cuando el miembro “se sale de la vagina durante el coito” y golpea la zona genital femenina.
«Deformidad de berenjena”
Para que el pene vuelva a su forma original, los médicos tuvieron que someter a cirugía al hombre. Le abrieron el miembro viril y repararon la uretra fracturada y el tejido genital. Después, drenaron la hinchazón e hicieron una prueba para comprobar si aún tenía la capacidad de erguirse.
A los cuatro meses de haber padecido esta deformidad, el paciente se recuperó y su miembro quedó totalmente enderezado. El hombre fue dado de alta con una sonda uretral que tuvo que utilizar por, al menos, 21 días más.
“Estoy satisfecho con los resultados, puedo eyacular e interactuar sexualmente con mi esposa sin experimentar ninguna molestia”; comentó para el estudio registrado por los médicos.