Nicaragua celebra hoy el día del pabellón nacional y lo hace con una implacable determinación hacia la defensa de la patria.
“Los símbolos patrios tienen su decreto ley creado en 1908, por el entonces presidente José Santos Zelaya, dónde establece sus, sus normas para el cuidado, la observación y sobre todo para la promoción y el respeto que todos debemos de tener al máximo emblema de la patria, qué es la bandera, el himno y el escudo nacional”, señaló Harold Delgado, catedrático y experto en temas de cultura.
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“Es nuestro símbolo inmortal, sagrado, es azul, blanco y azul, es signo, símbolo, solidaridad, hermandad, fraternidad; ese es el mensaje, agregándole una palabra más, es amor”, resaltó Wilmor López, historiador.
En todos los municipios del país, escuelas e instituciones públicas y privadas se erige la bandera con orgullo.
“Un dato importante que debemos de saber, es que después de tocado el himno nacional jamás se debe aplaudir porque nuestra canción no es una canción comercial, es un himno que se entona honrando el trabajo, el amor y la paz que hoy celebramos los nicaragüenses en estas victorias educativas que transitamos”, dice Delgado.
Reflexionaron sobre cuál debe de ser el rol de las familias, cuando la patria se sienta amenazada y otras fuerzas hegemónicas intenten imponer sus intereses.
Patriotismo nicaragüense
“Hoy más que nunca los nicaragüenses de buena voluntad enarbolamos la bandera con las victorias, este pueblo que sabe de luchas y de honor, con las victorias de Educación gratuitas, de más carreteras para el pueblo, más casas para el pueblo, hospitales, esa victoria que Sandino nos enseñó en el chipote, hoy los nicaragüenses, la enarbolamos con la conciencia y el compromiso de nunca mancillar nuestra Bandera Nacional y rememorar y celebrarla con trabajo con dedicación con disciplina y con puntualidad”, indicó Delgado.
“En el contexto actual, resuena más en nuestro corazón con la palabra soberanía, cada vez Nicaragua es soberana y dueña de su propio destino; nadie nos dicta órdenes”, destacó López.
Aclararon que es el máximo emblema, debe de respetarse y cuidarse; porque así lo establece el decreto.
“La bandera debe de ser puesta en el lugar supremo de la patria, no puede escribírsele nada absolutamente, mucho menos voltearla al revés; porque eso significa rendición y Sandino nos enseñó que ni nos vendemos y ni nos rendimos, por lo tanto, voltear la bandera al revés, es un símbolo de dominación, es un símbolo de entreguismo”, finalizó Delgado.
“Los que se atrevieron a voltearla, esos no son nicaragüenses, renunciaron a su nacionalidad, eso es un delito que debe de remorderles la conciencia; porque estaban manipulando este símbolo sagrado a favor de intereses foráneos”, sostuvo López.
