Los muertos en Honduras a causa de la COVID-19 ascendieron este sábado a 201 con dos nuevos casos confirmados, mientras que los contagios aumentaron a 5.094, informó el estatal Sistema Nacional de Riesgos (Sinager).
En su informe diario, en cadena nacional de radio y televisión, el Sinager indicó que de 561 nuevas pruebas de PCR practicadas, 208 dieron positivo, con los que el número de enfermos a nivel nacional ya superó los 5.000.
De nuevo, los departamentos de Cortés, en el norte del país, y Francisco Morazán, en el centro, los de mayor población, han registrado la mayor cantidad de contagiados con la mortal enfermedad.
El Sinager señaló además que del total de personas que han contraído la COVID-19, 524 están hospitalizadas, de las que 471 se encuentran en condición estable, 13 graves y 40 en unidades de cuidados intensivos.
Recuperados
En lo que respecta a los pacientes recuperados, hoy se registraron ocho casos nuevos, con los que la cifra aumentó a 536.
Las dos víctimas mortales confirmadas hoy son mujeres, una de 63 años, y otra de 80, originarias de los departamentos de Cortés y Francisco Morazán.
Los primeros dos casos de contagios con la COVID-19 en Honduras fueron confirmados el 11 de marzo, en dos mujeres procedentes de Suiza y España, que llegaron a San Pedro Sula, norte del país, y Tegucigalpa, centro.
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Reapertura de la economía
Una exigencia de varios sectores productivos del país es la reactivación económica ante las pérdidas que están teniendo por el confinamiento obligado que rige desde el 12 de marzo, como medida para frenar la pandemia del coronavirus.
Hasta ahora han venido operando algunos negocios como supermercados, farmacias, bancos, cooperativas y ferreterías, a los que luego se sumaron, de manera gradual, restaurantes de comidas rápidas y en las últimas dos semanas la industria de la construcción, salones de belleza y barberías.
Los negocios atienden a sus clientes, que deben llevar puesta al menos mascarilla, con medidas de bioseguridad para reducir el riesgo de contagio.
Se prevé que el 1 de junio se comience a organizar, en tres zonas del país, un ensayo para la reapertura de la economía de los demás sectores, pero con mayores controles, principalmente en empresas que tienen mucho personal, el que se irá incorporando poco a poco a sus actividades, dependiendo de los resultados del ensayo.
Oficialmente, la reapertura de la economía iniciaría el 8 de junio, mientras que este domingo se conocerá si sigue el toque de queda que rige desde a mediados de marzo.
La población está saliendo a abastecerse de alimentos y atender asuntos en bancos, entre otras actividades, para lo que dispone de un día cada quince, de lunes a viernes, a partir del último dígito del carné de identidad o pasaporte del ciudadano.
El sábado y domingo no sale nadie, salvo las personas que están ligadas a la actividad sanitaria y seguridad, quienes pueden movilizarse con un salvoconducto que en su momento se les extendió. EFE