Doña Nora Gregoria Aguilar López, todos los días se levanta a las 5 de la mañana para ir a vender sus golosinas en la parada de buses al costado norte de Plaza España, Managua; rutina que hace desde unos 25 años.
Hoy su día no inició normal, ya que fue sorprendida con una serenata de mariachis. El motivo era su cumpleaños número 78 y como antesala del festejo del Día de las Madres; su hija Ángela González Aguilar, de 56 años, le dio esta grata alegría.
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A sus 78 años, Doña Nora se gana digna y honradamente el sustento diario. Sale del barrio René Cisneros, en Managua, antes que salga el sol; para ofrecer sus golosinas a quienes pasan o van a tomar la ruta en esta popular parada.
Y no es que tenga hijos que no cuiden de ella, sino que esta es una manera de mantenerse viva, con energía, y andar dinero ganado con su propio esfuerzo pese ayudarse con un andarivel.
Digna madre trabajadora en Managua
«Su sueño era ir a México, pero no tenemos la posibilidad de pagar su viaje, así que mejor le trajimos el mariachi para que se sienta como si está allá«; dijo la hija, que con mucho amor y cariño premió ese ejemplo que Doña Nora da a decenas de jóvenes al ganarse su dinero trabajando pese a su edad.
«Si le quitamos que venga a vender aquí se va a enfermar y hasta se me puede morir. Para ella esta es su vida, la mantiene activa«; expresó entre lágrimas Ángela González.
Doña Nora tiene 4 hijos, 4 nietos y 8 bisnietos; y llena de alegría contaba su historia y la emoción por el mariachis que le llevaron hasta este punto de Managua.
«Uno siembra para cosechar y ahora estoy cosechando. Me siento muy alegre, contenta, me sorprendieron de mañana con esta serenata. A mí me gusta bailar»; dijo sonriendo y bailando Doña Nora Aguilar.
El vocalista del mariachi «Caballeros», Fernando Gutiérrez, manifestó que su música ha llevado miles de momentos de alegría en diferentes eventos; pero que esta ha sido una de las mejores historias de amor de una hija para su madre.
Un cumpleaños para no olvidar
Hoy para Doña Nora no fue un día cualquiera, es su cumpleaños y la primera vez que le ponen serenata con mariachis.
Su sonrisa y alegría terminó siendo agradecida con un buen baile al son de «Carmen, Se Me Perdió la Cadenita»,
Está hermosa historia en Managua, debe servir como motivación e inspiración para muchos hijos en este mes que se celebra a ese hermoso ser que simboliza el amor puro, ternura y comprensión; porque madre solo hay una.
