La sensación de presión en la cabeza a menudo es provocada por hábitos inadecuados o por problemas de salud que se deben tratar y resolver. Solo en contadas ocasiones se debe a enfermedades o condiciones graves.
La sensación de presión en la cabeza suele provocar miedo en las personas. De inmediato, se asocia con un problema grave, pero no siempre es así. Hay múltiples causas por las que se produce esta dolencia.
La presión en la cabeza a veces se experimenta de forma leve y, en otras ocasiones, es una sensación muy acentuada. Es posible que vaya acompañada de otros síntomas como dolor, vértigos, mareo, problemas de visión, calor, etc. La presencia de esos síntomas tampoco equivale a una afección grave de forma automática.
Es común que la presión en la cabeza se experimenta al agacharse, levantar objetos o ponerse de pie. A veces, cubre todo el cráneo, pero también es posible que se localice en la frente, la parte posterior de la cabeza, el centro del cráneo o las sienes.
Lo más habitual es que la sensación de presión que vaya acompañada de dolor, en alguna medida. En la mayoría de los casos, no hay de qué preocuparse. Solo hay motivos de alarma cuando tiene una intensidad desmesurada, es muy frecuente o se acompaña de ciertos síntomas. Las principales causas de la presión en la cabeza son las siguientes.
1. Mala postura
2. Estrés y ansiedad
3. Ataque de pánico
4. Fibromialgia
5. Migraña
6. Sinusitis
7. Problemas de oído
8. Problemas visuales
9. Problemas dentales
10. Nervio pinzado en el cuello
¿Qué hacer para la presión en la cabeza?
El tratamiento de la presión en la cabeza dependerá de la causa que la origine. En principio, es posible recurrir a remedios caseros como ponerse una compresa fría en la frente, hidratarse, hacerse un masaje en la cabeza o tomar un baño relajante de agua tibia.