Errol Spence Jr. se tardó unos cuantos asaltos en encontrar su ritmo y alcance después de una larga inactividad. Al final, se había ceñido otro cinturón de monarca.
El neoyorquino se convirtió en tricampeón welter, al defender sus cetros del Consejo y la Federación Internacional de Boxeo (CMB y FIB); en una pelea de unificación frente a una multitud que lo alentó ruidosamente.
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Al cubano Yordenis Ugás le pararon la pelea en el décimo episodio del combate del sábado por la noche, debido a que el ojo derecho del campeón de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) estaba prácticamente cerrado por la hinchazón.
“Pienso que, cuando la pelea comenzó, yo me puse algo impaciente”, dijo Spence. “En los rounds finales, cuando comencé a asestar mis golpes, a colocarlos y a elegirlos en vez de sólo pegar duro, pude conectarlo mucho y desgastarlo. Sentí que se quebraba, porque él no estaba lanzando los golpes habituales”.
La pelea estaba pactada a 12 asaltos, pero a los 1:44 minutos del décimo, el réferi Laurence Cole ordenó a Ugás que fuera a su esquina para que un médico le revisara el ojo por segunda vez. A diferencia de lo ocurrido dos episodios antes, cuando el combate continuó, éste fue parado, pese a las protestas de Ugás.
Spence volvió tras 16 meses de ausencia en los entarimados
Spence, quien peleó por primera vez en más de 16 meses, mejoró a una foja de 28-0. Su 22do nocaut marcó la primera vez en sus últimas cuatro peleas que el zurdo de 32 años no ha podido concluir una contienda.
El cubano de 25 años, quien cayó a una foja de 27-5, fue retirado del recinto en una ambulancia, hacia un hospital local.)
“Seguí pegando y creí que el réferi pararía esto antes”, dijo Spence.
Ahora parece probable una contienda entre Spence y el monarca de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), Terence Crawford, para coronar a un monarca unificado en la división de las 147 libras.