Momentos de horror se vivieron en un barrio de Nueva York, en Estados Unidos, cuando un hombre notó que un pie humano sobresalía de un recipiente
De acuerdo con las autoridades, era Nisaa Walcot, una madre de 35 años. Su primo, Khalid Barrow, la mató, escondió su cadáver en el recipiente plástico y lo dejó abandonado en una acera del Bronx, en Nueva York.
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La policía arrestó a Barrow, de 21 años, acusado de asesinato y ocultación de un cadáver, luego de revisar los videos de seguridad que revelaron su crimen, reseñó Daily Mail.
Así mismo, las imágenes muestran que el 16 de febrero los primos entraron juntos al apartamento donde vivían, ubicado en East Harlem, un barrio de Nueva York, Estados Unidos. Más tarde, Barrow salió solo de la vivienda, reportó New York Post.
Momentos de horror se vivieron en un barrio de Nueva York
En otro video, se ve a Khalid Barrow arrastrando un recipiente de plástico desde el edificio. El hallazgo del cadáver se produjo el 25 de febrero, en la acera de University Avenue, cuando el hombre que buscaba muebles de segunda mano percibió un mal olor.
Hasta ese día, no había señales de vida de Nisaa Walcot. Su tía Bernadette Butler Colon publicó en Facebook: “Esta es mi sobrina Nisaa Walcott. Hace una semana que está desaparecida. Ella tiene un hijo maravilloso y una gran cantidad de familiares y amigos que esperan su regreso seguro a casa”.
Un hombre mató a su prima
Los familiares dijeron haber recibido mensajes desde el teléfono celular de la madre trabajadora. Las autoridades sospechan que el autor del crimen se hizo pasar por su víctima al enviar textos con frases inconsistentes a sus parientes desesperados.
Nisaa Walcot tenía 15 años trabajando en una barbería. Vivía bajo el mimo techo con su hijo adolescente y Khalid Barrow. Familiares y amigos aún no entienden por qué Barrow mató a esta Nisaa; quien le dio cobijo en su casa, según comentó un vecino a New York Post.
“Ella era una persona hermosa. Tenía mucha vida. Ella era una empresaria. Ella era una buena persona. Era una gran mujer”, dijo su amiga y jefa Norma Menedez.
“Buena persona, espíritu libre y amable, cariñosa, emprendedora… Era una buena mujer. Ella no merecía ser desechada como basura en la calle”, expresó su amiga Delia Soto al canal de televisión Kion546.
