Lo que sería la última entrega de la noche resultó ser el último viaje para Eduardo Francisco Pilarte Aguilar; quien se ganaba la vida como repartidor y que acabó sus días tras ser brutalmente embestido por una camioneta del Puente Larreynaga una cuadra hacia el norte, Managua. La fuerza del impacto fue tanta que la motocicleta en la que viajaba se prendió en llamas y el cuerpo acabó a un lado de la carretera.
Por si fuera poco, al conductor de la camioneta le importó poco lo que había provocado y siguió su marcha aún con el frente del vehículo destrozado; y con una patrulla de la Policía Nacional tras de él. El daño en la camioneta era tanto que a las tres cuadras de donde se dio el accidente y luego de ser interceptado, no pudo continuar.
La enardecida población quería tomar la justicia en sus manos al ver la dantesca escena del cuerpo ensangrentado, la motocicleta incendiándose y el responsable huyendo como si nada. Por esta razón la Policía Nacional tuvo que actuar de forma rápida para evitar otra tragedia. Este fue trasladado casi de inmediato en una patrulla a la delegación cuatro donde sería puesto en detención.
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Accidente en Managua
«Yo estaba esperando la ruta que ya voy para mi casa y la camioneta viene de arriba hacia abajo, la motocicleta de sur a norte. El de la camioneta llega a la intersección y sin frenar se tira como si nada; no le importó que viniera el motociclista. Si yo no me he apartado hasta yo estuviera muerto. Al muchacho lo levantó en el aire y la moto la arrastró hasta el puente. Se fue como si nada hasta aquí que lo vinieron a parar», relató un señor quien presenció lo sucedido.
La Policía Nacional acordonó toda la zona; para realizar el debido proceso investigativo en lo que el cuerpo era llevado por los forenses al Instituto de Medicina Legal.
Algunos familiares que se presentaron al lugar; entre llantos tenían que resignarse a ver el cuerpo de este joven de 29 años que buscando la vida encontró la muerte.
