«Romeo y Julieta»: pareja se envenenó porque no los dejaron casarse en Pakistán

Foto: "Romeo y Julieta" pareja se envenenó porque no los dejaron casarse en Pakistán/Referencia

Una joven pareja de Faisalabad, provincia de Panyab (Pakistán) se suicidó después de que sus padres les prohibieron casarse. En un hecho que algunos medios internacionales han vinculado con la historia ficticia de Romeo y Julieta: ambos tomaron veneno.

De acuerdo con el portal VICE, la pareja fue encontrada en estado crítico el domingo 7 de noviembre y, luego, fue trasladada de urgencia a un hospital en Pakistán, donde finalmente llegaron sin signos vitales.

El incidente ocurrió durante la celebración de la boda de Muqaddas, poco antes de la llegada del novio y su familia. Según la Policía de Pakistán, la mujer estaba enamorada de Adnan y ambos querían casarse; pero los padres se negaron y arreglaron su matrimonio con otro pretendiente.

"Romeo y Julieta" pareja se envenenó por que no los dejaron casarse
Foto:»Romeo y Julieta»:pareja se envenenó porque no los dejaron casarse en Pakistán/Cortesía

Así como en otros rincones de Asia del Sur, como India, en Pakistán los matrimonios concertados entre padres es común. Algunas familias lo acuerdan en base a la clase, la etnia, la religión y el estatus socioeconómico.

De hecho, un sondeo de 2019 realizado por Gallup, en Pakistán mostró que el 85% de paquistaníes se habían comprometido a través de un matrimonio arreglado. Mientras que solo el 5% lo había hecho por amor.

Matrimonio arreglado en Pakistán

“En nuestra sociedad el matrimonio en sí es un factor de riesgo para la salud mental”; lamentó el psiquiatra Abdul Wahab Yousafzai a VICE en Pakistán.

En 2016 otra pareja se envenenó en la ciudad de Sargodha luego de que sus padres rechazarán su matrimonio. Un año después, en la localidad de Gujranwala una pareja saltó a las vías del tren.

Irónicamente, en Pakistán el suicidio es considerado un delito. Las personas que sobreviven pueden ser castigadas con multas y probablemente con penas de cárcel.

Larepublica.com