En un intento desesperado una familia afgana decide vender a su bebé, luego de que estén muriendo de hambre; esto sucedió por la desesperación de tener dinero para evitar que sus otros hijos mueran al no poder consumir alimentos. Por 500 dólares, los afganos dieron a su hija a un hombre que quiere que la bebé se case con su hijo.
Tras la toma de el Talibán, los fondos extranjeros que ayudaban a los afganos de escasos recursos desaparecieron; con ello surgió que la economía esté al borde del colapso.
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En un pueblo en las afueras de Herat en Afganistán se realizó la venta de la niña, cuyo comprador aseguró que criará a la bebé para que posteriormente se case con su hijo; aunque no hay garantía de sus intenciones, según cita Daily Mail.
El hombre dió un pago por adelantado de 250 dólares, suficiente para que la familia de la niña pudiera alimentarse por algunos meses. El resto del pago lo dará a la familia una vez que vaya por la niña cuando ya logre caminar.
La pandemia y la guerra devastaron a las familias de Afganistán
El reciente colapso del Gobierno Afgano con la segunda llegada del Talibán; la pandemia de COVID-19 que ha mermado las economías del mundo y la cancelación de los fondos extranjeros que cubrían aproximadamente el 40 por ciento del Producto Interno Bruto, han llevado a los talibanes ha vivir una dramática situación económica que los tiene al borde de la muerte.
“Mis otros hijos se estaban muriendo de hambre, así que tuvimos que vender a mi hija”; afirmó la madre de la bebé para la BBC. “¿Cómo no voy a estar triste? Ella es mi hija. Ojalá no tuviera que vender a mi hija”; relató la angustiada madre.
El padre de familia solía trabajar como recolector de basura, pero ahora atraviesa por tiempos difíciles. “Ahora no tenemos harina, ni aceite en casa, no tenemos nada. Mi hija no tiene idea de cuál será su futuro”; contó el padre de la bebé y de otros tres niños.
La semana pasada, ocho niños murieron de hambre en Kabul, eran parte de una familia donde su padre murió de cáncer y su mamá de una afección cardiaca. “Los niños tenían tanta hambre que ni siquiera podían estirar las piernas”; indicó un predicador de una mezquita que halló a los cadáveres de los niños.
Con información de Daily Mail y BBC.