Un joven de 26 años en Zimbabue, sur de África, fue inculpado de «asesinato» tras la muerte el mes pasado de su esposa, Anna Machaya, de 14 años, durante el parto.
La muerte de la adolescente fue el 15 de julio; esta noticia provocó indignación en las redes sociales.
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De hecho, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y varias oenegés condenaron las circunstancias del deceso; una petición popular recogió más de 92.000 firmas.
El matrimonio antes de los 18 años en este lugar es ilegal desde 2016; en tanto la edad de consentimiento para tener relaciones sexuales está fijada a partir de los 16 años.
Sin embargo, Zimbabue es uno de los países africanos donde los matrimonios de menores son más habituales.
El marido, Hatirarami Momberume, fue detenido esta semana y fue presentado el viernes ante un tribunal de Mutare; (al este del país).
La decisión fue tomada luego de que esté acusado de «asesinar» a la mujer por no haber conducido con ella hacia el hospital cuando empezó a dar a luz; a pesar de que «sabía que había un riesgo real o posibilidad de que su conducta pudiera causar la muerte».
Asimismo es acusado de relaciones sexuales con una menor de edad.
Las parteras que se ocuparon de Anna Machaya también comparecieron ante el tribunal y podrían ser también inculpadas; así como los padres de la menor.
Según las estadísticas oficiales, un tercio de los casamientos en Zimbabue se realizan con una joven menor de edad, y en las zonas rurales son una de cada dos.
Nota elaborada por: Ámbito