Bekah King, Abi Roberts y Morgan Tabor son tres mujeres que tienen mucho en común y, sin saberlo, también el mismo novio.
Fue Morgan, de 21 años, la primera en enterrase de que su pareja le había sido infiel, después de descubrir la cuenta de otra mujer en VSCO, una aplicación de fotografía, inundada de fotos de ella con su novio.
“No tengo palabras para describir la sensación que tuve al ver la foto de él con otra chica. Pensé que me iba a casar con este tipo. Habíamos hablado de casas y de cómo sería nuestro matrimonio”, dijo Morgan Tabor para CNN.
Luego, se puso en contacto con la mujer y siguieron indagando sobre las andanzas del hombre. Finalmente, encontraron que Abi Roberts, de 19 años, también era otra de las parejas del hombre infiel. Rápidamente la contactaron y le revelaron la verdad.
“Quedé destrozada. Lloré delante de estas dos chicas que no conocía. Fue muy emotivo. Sentí que no había luz al final del túnel”, expresó Abi Roberts.
Las tres mujeres terminaron haciendo una videollamada que duró seis horas y, en medio de ella, el novio infiel llegó a la casa de Morgan con flores.
“Él quería sorprenderla, pero entonces Morgan cogió las flores, las puso en el suelo y dijo: ‘Hoy he hecho nuevas amigas’ y le enseñó su teléfono con las dos en FaceTime. Se le cayó la cara de vergüenza. Fue impagable verlo», confesó Abi Roberts.
Después de dar explicaciones y excusas, las tres mujeres le terminaron. Pese a ello, siguieron investigando en las redes sociales y descubrieron que su exnovio había estado saliendo con seis mujeres en simultáneo, incluidas ellas.
Una de esas mujeres era Bekah King, de 21 años, quien había estado saliendo casualmente con él durante cinco meses.
“Las chicas encontraron mi Instagram y me enviaron un mensaje e inmediatamente tuvimos otra llamada de cinco horas», declaró Bekah, también para CNN.
Tras algunas semanas de ‘tusa’, la angustia se convirtió en curación y Bekah, Morgan y Abi se hicieron rápidamente amigas. No tardaron en darse cuenta de que todas tenían el mismo sueño: comprar un bus y explorar Estados Unidos.
En marzo, las jóvenes compraron y renovaron un bus escolar por 5 mil dólares- un poco más de 19 millones de pesos-. Pusieron tablas en el suelo, aislamiento, pintaron el exterior, construyeron camarotes y una cubierta en el techo.
Desde ese momento, las tres mujeres se aseguraron de sentirse mentalmente preparadas y curadas tras la terrible experiencia que vivieron juntas.
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“Ya no hablamos de él. No forma parte de nuestras vidas. Hay mucho más a lo que aspirar. Está en el rincón de atrás de nuestras mentes. Hemos pasado al siguiente capítulo de nuestras vidas. Se trata de nuestra aventura, de nuestro crecimiento y de hacia dónde vamos ahora”, afirmó Morgan Tabor.
El 25 de junio comenzó su travesía por todo el oeste de Estados Unidos. Trabajan a distancia para financiar su viaje, sin ayuda de sus padres ni de nadie, pero recibieron donaciones a través de una página web.
La idea principal era volver a sus casas en noviembre, pero las tres están considerando la posibilidad de prolongar el viaje.
Por Caracol
