Al menos 12 personas, entre ellas nueve ciudadanos chinos, murieron el miércoles en la explosión de un autobús que cayó por un barranco, en el noroeste de Pakistán; un siniestro que las autoridades de Islamabad calificaron de accidente y las de Pekín, de ataque.
El autobús transportaba a ingenieros, topógrafos y personal de mantenimiento mecánico de origen chino que trabajan en la construcción de la presa de Dasu, en la provincia de Jaiber Pastunjuá.
Falla en autobús
«La explosión provocó fuego en el motor, hizo que el autobús cayera en un barranco», dijo a la AFP un responsable local paquistaní.
Fuentes chinas y paquistaníes confirmaron el accidente y el balance de víctimas mortales a los que se añaden 28 chinos heridos. Inicialmente informaron de 13 muertos pero luego revisaron la cifra a la baja.
Te puede interesar: ¿Qué le pasó? Presidente Jair Bolsonaro hospitalizado en Brasilia
Sin embargo, los responsables de los dos países divergen sobre las causas de la explosión.
El Ministerio paquistaní de Relaciones Exteriores afirmó que se ha abierto una investigación pero, en un comunicado, detalló que el autobús «cayó en el barranco tras un fallo mecánico, que provocó un escape de gas que fue el origen de la explosión«.
Sin embargo, China condenó los hechos y los calificó de «ataque», pidiendo a Pakistán que castigue con fuerza a los culpables.
Desde hace tiempo, la seguridad de los trabajadores chinos en los diferentes proyectos de infraestructuras de Pakistán se convirtió en una preocupación para Pekín; que en los últimos años ha invertido miles de millones de dólares en este país.
También puedes ver: Papa Francisco salió del hospital tras su operación de colon
En abril, un atentado suicida tuvo como objetivo el hotel donde se alojaba el embajador chino en Quetta, capital de la provincia de Baluchistán (oeste) y fue reivindicado por Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP), los talibanes paquistaníes. Al menos cuatro personas murieron y decenas resultaron heridas.
Por Swissinfo.ch