La actividad física rivalizó con algunos medicamentos para el corazón y superó a la medicina para un derrame cerebral.
Los hallazgos sugieren que el ejercicio debe añadirse a las recetas médicas, opinan los investigadores. Sin embargo, los expertos destacaron que los pacientes no deben deshacerse de sus medicamentos para sustituirlos por el ejercicio, sino que deben utilizar ambos al mismo tiempo.
Actualmente, muy pocos adultos hacen suficiente ejercicio. Sólo un tercio de las personas en Reino Unido llevan a cabo por lo menos 2,5 horas de actividad de intensidad moderada a la semana (como montar en bicicleta o caminar velozmente), tal y como viene recomendado.
«Al tomar medidas importantes, como el ejercicio regular, una dieta balanceada y dejar de fumar, las personas pueden reducir significativamente el riesgo de accidente cerebrovascular».
«La actividad física moderada, por ejemplo, puede reducir el riesgo de accidente cerebrovascular hasta en 27%».