Desde hace tres meses una vivienda ubicada en el barrio Jonathan Gonzáles sirve como camaronera, lo que ha provocado un malestar entre los vecinos, quienes se quejan del mal olor que provoca los desperdicios de los mariscos.
Aparentemente la jornada laboral inicia desde muy temprano cerrando sus labores a las cinco de la tarde, es por ello que los habitantes de este punto piden a las autoridades del MINSA pongan cartas en el asunto.
La vivienda está ubicada de la parada El Manguito dos cuadras al sur una cuadra al este.