Una empresa tecnológica de Pereira (Colombia) ha desarrollado un dispositivo que permite que niños con discapacidad visual reconozcan formas y colores en una pantalla a través del tacto. Gracias a este sistema, llamado Proyecto Iris, los alumnos identificarán formas geométricas y conceptos visuales complejos y aprenderán en las mismas condiciones que sus compañeros.
La aplicación contiene un sistema de códigos que transforma los colores en vibraciones. «Por ejemplo, el negro va a una velocidad mayor, el blanco es la ausencia de vibración y el rojo es intermedio, y así con cada color», declara María Fernanda Zúñiga Zavala, una de las integrantes del equipo. Las imágenes se representan en una cuadrícula en la que cada cajetín vibra de forma independiente, permitiendo así que un estudiante pueda distinguir formas táctiles siguiendo con el dedo un trayecto que posea la misma vibración. De esta manera, un estudiante en situación de discapacidad visual puede identificar formas y colores al desplazar el dedo por la cuadrícula y según la velocidad de las vibraciones.
El sistema también incluye un software con una base de datos de imágenes pedagógicas y 134 actividades adaptadas a los programas de enseñanzas primarias. Sus creadores han verificado la eficacia del método como herramienta pedagógica en estudiantes de cinco a once años de edad de un colegio para niños invidentes. «Se logró comprobar que con la aplicación de Iris se mejoran las habilidades táctiles y cognitivas de los estudiantes», cuenta Zúñiga.