Entre los delfines jorobados de las aguas costeras de Australia hay representantes de una especie antes desconocida.
El estudio sobre el tema ha sido publicado en la revista científica ‘Molecular Ecology’.
Un grupo de especialistas internacionales de la organización Conservación de la Vida Silvestre (Wildlife Conservation Society) tomó muestras genéticas a más de 235 delfines y llegó a la conclusión de que la población de estos mamíferos cuenta con cuatro especies distintas en vez de tres, como se suponía antes.
El hallazgo es un paso importante para el esfuerzo de conservar los delfines, que están en peligro de extinción, ya que es indispensable saber de manera absoluta, qué es lo que se quiere mantener.
Varias especies de delfines no interactúan entre sí y no coinciden en sus preferencias alimenticias y conductas.
Agencias