Al contrario de lo que muchos piensan, todavía no ha llegado la muerte del CV. Y es que el curriculum sigue siendo el principal vehículo para conseguir un trabajo. Por ello, debemos actualizarlo, darle frescura y ponerlo al día, tanto en contenidos como en imagen.
Se dice que el director de recursos humanos dedica un tiempo medio de unos 6 segundos en echar un vistazo a un CV. En ese periodo tan corto tienes que captar su atención, lograr de algún modo diferenciarse del resto. Pero, ¿cómo conseguir que el curriculum no acabe en la basura y que nos llamen para una entrevista? La publicista Alexia Herms nos da una serie de consejos:
1. No reflejes en el CV un objetivo profesional genérico, no aporta nada. Necesitas una introducción poderosa: una declaración de tu marca personal y un resumen llamativo de tu carrera profesional serían ideales.
2. Crea un diseño único para tu CV, ¡también habla de ti!
3. Incorpora palabras clave, conceptos relevantes sobre ti que capten la atención del reclutador.
4. Apuesta por un lenguaje directo y sencillo, ¡pero sin caer en la informalidad! La persona que lo lea pensará que eres directa y que no le das muchas vueltas a las cosas. ¡Puede ser un punto a tu favor!
5. No pongas habilidades profesionales universales, esto es, habilidades que puedan tener muchas personas. Muestra tus facetas personales, esas que pueden ser relevantes para la posición que quieres conseguir.
6. Pon una breve descripción de los trabajos que has realizado. Muestra todos tus logros, el modo en que has contribuido y aquellos desafíos que hayas superado. Te distinguirá de los demás, y es que, ¡no hay dos personas con la misma experiencia!
7. Utiliza verbos de acción, así tu CV sonará a resultados, éxitos y metas conseguidas. Por ejemplo, antepón «encabecé» y «lancé» a «mis deberes incluían».