El tribunal que supervisa la inteligencia de EE.UU. autorizó la expansión de poder de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) pese a saber que violaba regularmente la privacidad de los ciudadanos.
Así lo indica la decisión del Tribunal de Vigilancia de Inteligencia Extranjera de EE.UU. (FISA, por sus siglas en inglés), documento que acaba de ser desclasificado, aunque de forma editada (incluso la fecha de la decisión está oculta), junto a muchos otros.
La NSA tenía derecho a espiar la correspondencia electrónica de los estadounidenses para buscar a personas que podrían estar vinculadas a gente conectada con terroristas y otros enemigos de EE.UU. Sin embargo, a veces los analistas de la NSA buscaban en las bases de datos a personas que no eran terroristas ni espías extranjeros, detallan los documentos.
Aparte de eso, la NSA no cumplía con su obligación de proteger las identidades de los ciudadanos. Al compartir las evidencias criminales con la Policía, en múltiples casos la NSA no borraba los nombres y las direcciones electrónicas de la gente inocente, como debía hacer. «La difusión de información personal de los estadounidenses es la práctica habitual de los analistas de la NSA», citan los documentos la opinión del juez John Bates.
El Tribunal indicó las violaciones de la NSA y demandó medidas para limitar la difusión de información personal de los ciudadanos, sin embargo, y a pesar de ello, aprobó el aumento de los poderes de la NSA.